Nacho busca resarcirse y brillar en Córdoba Futsal tras su experiencia en la élite del futsal
Carlos Castillo / 31-10-202
Ignacio Gómez Benítez, conocido como Nacho, es uno de los nuevos fichajes del Córdoba Futsal para la temporada 2025/26. Llega cedido por el Inter con el objetivo de aportar un salto de calidad al equipo y reencontrarse con su mejor versión tras una campaña complicada en Zaragoza. En exclusiva con HA10, repasa su trayectoria en Primera División y sus expectativas de futuro.
Apenas había dado sus primeros pasos en el fútbol sala profesional cuando se dio a conocer al mundo al proclamarse campeón del Europeo sub-19 en 2022. “Fueron muchos años de convocatorias con la sub17, 18 y 19, también coincidió con el Covid, que lo aplazaron y lo pusieron un año más tarde y la verdad es que fue una experiencia increíble porque jugar una Eurocopa con tu país, pues es lo máximo y luego pues poder ganarla encima en casa, que fue en Jaén, pues la verdad es que fue súper bonito”, recuerda con emoción.
Pese a su juventud, Nacho ya acumula varias temporadas en Primera, una categoría en la que no es fácil hacerse un hueco entre jugadores veteranos. “Los dos primeros años suelen ser así, más complicados, pero yo la verdad es que tuve la suerte de coincidir con Pato en Tudela, en el Ribera Navarra, que Pato pues me dio toda la confianza del mundo. Al final, con dieciocho años, estaba jugando muchísimos minutos en Primera División, que encima era mi primera temporada en Primera, pues metí creo que fueron ocho o nueve goles. Después también nos metimos en Copa de España en lo que fue una temporada inolvidable”, relata con orgullo.
El ala madrileño afronta con ilusión esta nueva etapa en Córdoba, donde espera volver a sentirse importante. “El entrenador me está dando muchísima confianza desde que ha llegado, me siento muy importante en el equipo y eso al final pues es lo que me faltó el año pasado en Zaragoza: sentir esa confianza del entrenador y notar que eres muy importante para el equipo”, explica convencido de que esta vez podrá mostrar su mejor versión.
Será su segunda cesión consecutiva por parte del Inter, aunque no pierde de vista su sueño de regresar y consolidarse en el club que le vio crecer. “Al final estamos hablando de Inter, uno de los equipos con más historia del fútbol sala, entonces ahora me estoy centrando en hacer muy buen año en Córdoba, que yo creo que es un equipo en el que puedo dar un buen nivel tanto en lo individual como en lo colectivo. Yo creo que puede ser una buena temporada y, bueno, con el objetivo de hacer muy buen año para poder llegar al Inter el año que viene, que el año que viene es mi último año de contrato”, confiesa.
Nacho también busca resarcirse de la temporada pasada en el Zaragoza, donde las cosas no salieron como esperaban y acabaron descendiendo. “Muchos partidos también se nos escapaban en los últimos minutos, pero es que al final fue una serie de cosas que en Primera División, si no las tienes controladas… También había muchos jugadores que no habían jugado en Primera División y todo eso pesa. Luego, pues eso, al final yo creo que nos faltó esa experiencia, esa pegada también de poder rematar partidos que se nos escaparon en los minutos finales”, analiza con autocrítica.
Cecilia Blanco, del tatami al aula, una vida dedicada al judo y a la enseñanza
Aitor Serrano / 30-10-202
Cecilia Blanco es una exjudoca profesional que, durante su trayectoria, contribuyó a situar al deporte español en la élite mundial de las artes marciales. Siete veces campeona de España, con grandes éxitos a nivel europeo y dos participaciones en los Juegos Olímpicos, su carrera está marcada por la constancia, la exigencia y el amor por el judo. En conversación con HA10, repasa sus recuerdos y aprendizajes dentro y fuera del tatami.
Con tan solo seis años, Cecilia comenzó a practicar judo como una forma de canalizar su “exceso de energía”, rasgo que siempre la ha caracterizado. En un principio, lo veía como una actividad extraescolar más: “dedicarme al judo lo veía un poco inalcanzable, pero era mi sueño”. Sin embargo, esa pasión inicial pronto se transformó en una vocación. “Los deportistas tendemos a ser inconformistas y esa actitud es la que nos impulsa”, explica. Con esa mentalidad llegaron los primeros triunfos. Aun así, Cecilia subraya que valora más el camino y el esfuerzo que las medallas, a las que considera efímeras, y destaca que “es todo lo demás lo que en verdad enriquece a la persona”.
Los Juegos Olímpicos son, para cualquier deportista, el máximo escenario de competición. Cecilia tuvo el privilegio de participar en dos ediciones. La primera, en Atenas 2004, donde obtuvo diploma olímpico, le dejó una huella imborrable: “Fue una de las mayores satisfacciones de mi vida”. Recuerda la experiencia como algo mágico y único, consciente del honor que supone representar a su país en un evento de tal magnitud. “Participar en los JJOO no solo es un honor, también otorga mayor estatus y reconocimiento”.
Su segunda participación llegó en Londres 2012, cuando ya se encontraba en la recta final de su carrera. “Llegué más cansada”, admite. Aquellos Juegos fueron el escenario de su despedida profesional, el broche perfecto para una trayectoria ejemplar.
Tras su retirada, Cecilia no se desvinculó del deporte. Doctora en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte y profesora en el INEF, ha orientado su carrera hacia la docencia, compartiendo su experiencia con las nuevas generaciones. “Siempre que doy clase pienso que es una suerte poder transmitir mi pasión por un deporte que me ha dado tanto”, afirma.
Esa vocación por educar a través del deporte se materializó en Sportmiko, empresa que gestiona y desarrolla programas deportivos, culturales y de ocio para jóvenes con un enfoque didáctico. La idea surgió en los últimos años de su carrera, durante unas prácticas promovidas por el CSD en materia de reinserción laboral para deportistas. A partir de esa experiencia, decidió crear una empresa de actividades extraescolares, inicialmente centrada en el judo. Con el apoyo de personas cercanas, nació Sportmiko, con el objetivo de educar en valores a través del deporte.
Entre sus proyectos destaca “Judo para Todos”, una iniciativa que fomenta la igualdad de oportunidades dentro del deporte. “Son proyectos creados desde el corazón, con la convicción de que el judo tiene un enorme poder para contribuir a una sociedad mejor”.
Cecilia Blanco ha sido y sigue siendo un referente dentro y fuera del tatami. Su compromiso con la enseñanza y la transmisión de valores garantiza que su legado perdure en las futuras generaciones de deportistas.
Borja Puerta, una historia de superación marcada por el trabajo y el sacrificio tras un grave accidente
Jose Daniel García / 30-10-202
Borja Puerta Sánchez, portero barcelonés que milita actualmente en el Viña Albali Valdepeñas FS, cuenta en exclusiva para HA10 cómo ha forjado su propio camino hasta la élite. Un recorrido que en 2017 parecía imposible tras el grave accidente que sufrió en una mano, y que le obligó a trabajar día y noche para volver a disfrutar de lo que más ama: jugar al fútbol sala. El guardameta azulón repasa su trayectoria, desde los momentos más difíciles hasta las metas que se ha propuesto esta temporada con el conjunto manchego.
Borja recuerda lo duro que fue aquel episodio que generó muchas dudas en él, justo cuando atravesaba una etapa de plena proyección con tan solo diecisiete años. “Fue una etapa complicada”, confiesa al rememorar un momento que le marcó profundamente. En su relato, explica que la importancia de “la movilidad y el físico” en su posición le hizo dudar sobre si podría volver a practicar el deporte que más le apasionaba. Con emoción, el portero quiso reconocer a quienes le ayudaron en ese proceso: “Quiero agradecer el trabajo de médicos, fisios y hospitales, sin olvidarme de mis padres, que fueron los más importantes y estuvieron en los peores momentos”.
Tras su regreso a las pistas, Borja nos habló sobre cómo afrontó su readaptación a los entrenamientos y la competición al máximo nivel. Destacó que el papel de sus entrenadores y compañeros fue clave para ir recuperando minutos y confianza en la élite del fútbol sala español. Sobre su paso por Santa Coloma, donde permaneció diez temporadas, afirma que fue una etapa fundamental en su crecimiento personal y deportivo: “Santa Coloma es mi casa”.
El verano de 2025 marcó un punto de inflexión en su carrera. Borja decidió emprender una nueva etapa y fichó por el Valdepeñas, club inmerso en un ambicioso proceso de reconstrucción liderado por el técnico Marlon Velasco. El portero se siente plenamente identificado con el proyecto y se define como “soy un portero con buen juego de pies, visión ofensiva y manejo de balón”. Asimismo, destacó el estilo del equipo: un conjunto alegre, competitivo y cada vez más asentado en los conceptos que transmite su entrenador. Aunque los objetivos aún no son firmes, Puerta subraya que el equipo aspira a clasificarse para los play-offs.
En cuanto a su futuro, Borja tiene claro que su prioridad es la presente campaña con el Valdepeñas. Por el momento, no contempla proyectos fuera de España, pues considera que la liga española es “la mejor del mundo”.
Por último, reflexiona sobre la evolución del rol del portero en el fútbol sala moderno. Aunque reconoce la creciente importancia del juego con los pies, defiende que “las paradas y los reflejos siguen siendo fundamentales para ser un portero completo”.
Gonzalo Castejón: “La temporada pasada fue muy buena pero tenemos clavada la espinita de la Champions"
Héctor Magano / 29-10-202
La temporada pasada fue redonda para el Cartagena, que se proclamó campeón de liga y de la Supercopa de España. Uno de los protagonistas de aquel éxito fue Gonzalo Castejón Fluixa, ala del conjunto cartagenero. “La verdad que la temporada pasada fue muy buena, pero creo que podemos mejorarla”, comentaba Castejón tras cerrar un curso histórico.
Formado en el colegio El Pilar de Valencia, Castejón dio sus primeros pasos en el fútbol antes de decantarse definitivamente por el fútbol sala. Su desarrollo se consolidó en el equipo juvenil del Levante, donde llegó a debutar en Primera División. En su segunda temporada ya defendía los colores del Alzira FS. “Supe que quería ser profesional en el tercer año en Alzira, donde clasificamos para los playoffs”, recordaba. Ese momento marcó un punto de inflexión en su carrera: “Me hizo dar el pasito que creo que me faltaba para decidirme”, expresaba el jugador.
“Por suerte en el Pilar hemos tenido una generación muy buena de jugadores que han logrado llegar a varios campeonatos de España”, añadía Castejón, subrayando la calidad del grupo con el que creció.
Su salida del Alzira se produjo hace tres años, cuando decidió fichar por el Cartagena, un paso que considera clave en su trayectoria. “Para mí fue dar el salto, la decisión fue fácil y rápida y aunque al principio me costó asimilarlo porque nunca había salido de casa, estoy muy contento”, declaraba Castejón para HA10.
Pese a haber levantado dos títulos la temporada anterior, el valenciano mantiene intacta su ambición. “Tenemos que mejorar la constancia, no tener tantos altibajos y quedarnos entre los tres, cuatro primeros de la tabla”, señalaba. En cuanto a los objetivos futuros, lo tiene claro: “La Supercopa es una meta que siempre vamos a tener, ojalá hacernos con otros títulos como la Copa del Rey y la Champions”, comentó, recordando lo cerca que estuvieron de lograrla el año pasado. Entre los trofeos que más ilusión le harían está la Copa de España, una competición que vive con especial emoción: “El año pasado la viví por primera vez, a pesar de que perdiéramos en la ronda uno, es para mí todo un sueño hacerme con ella”.
A nivel internacional, también sueña en grande. “Es lo que todo el mundo quiere, representar a su país y en una competición oficial, ojalá estar ahí”, afirmaba la reciente incorporación de la selección española, refiriéndose al Europeo.
En el presente curso, el Cartagena suma cinco victorias, una derrota y dos empates. “A la afición le prometo que nos vamos a dejar todo en cada partido, creo que hasta ahora lo hemos hecho”, respondía Castejón al ser preguntado por el rendimiento del equipo. “También les pido a ellos que confíen en nosotros, que sigan animando y que nos apoyen allá donde vayamos”.
Por último, el jugador nos habló de sus referentes en exclusiva para HA10: “Si te digo la verdad nunca he tenido un referente muy grande; a pesar de ello, me he fijado en jugadores como Batería o Miguelín”, reconocía, refiriéndose a dos zurdos con gran pegada. Entre sus influencias fuera del futsal destaca Rafa Nadal, de quien ha aprendido el hambre de victoria y el esfuerzo que caracterizan su mentalidad. “Cada jugada cuenta porque es un juego muy rápido y puede pasar de todo”.
Elenita García, la futbolista que aprendió que también hay que saber parar
Laura Piqueras / 29-10-202
Desde que tiene memoria, Elena García Martos, más conocida como Elenita, ha vivido con un balón en los pies. En una entrevista para HA10, repasa su trayectoria deportiva, marcada por los altibajos del fútbol sala y el camino que la llevó hasta la Primera División, antes de regresar a la liga autonómica.
El pasillo de su casa fue su primer lugar de entrenamiento, junto a su padre, quien había sido deportista de élite de pelota valenciana. “Mis primeros recuerdos son desde que tengo uso de razón, desde los tres añitos, cuando jugaba en el pasillo de casa con mi padre. Recuerdo esperarlo preparada para dar unos pases o hacernos unos toques. Eso a mí me hacía feliz”.
Esos momentos con su padre despertaron en ella la vena competitiva que más tarde daría sus frutos.
Sin embargo, no todo fue un camino de rosas. Su familia atravesó un momento económico complicado y, para poder jugar al fútbol sala, debía desplazarse hasta Alcoy. “No había equipo en mi pueblo y tenía que desplazarme a Alcoy, casi a cincuenta minutos. Conllevaba un gasto en gasolina que no podíamos permitirnos. Si no llega a ser por mi madre, que dijo que verme jugar era lo más feliz que había visto, probablemente no habría seguido vinculada al deporte”.
Con tan solo catorce años debutó en Segunda División, y apenas tres años después la Universidad de Alicante la llamó para jugar en la máxima categoría. Elenita, obviamente, aceptó y pensó que “fue el mejor camino que podía tomar”. Durante su etapa en Alicante alcanzó su madurez deportiva y personal. “De los 20 a los 25 años fueron los mejores años de mi carrera. Fuimos subcampeonas de liga, llegamos a la final de la Copa y ganamos el Europeo en Coimbra”.
Más tarde llegó el salto al Burela, uno de los equipos más destacados del momento. Pero no todo fue tan idílico. La pandemia de la COVID-19 la obligó a replantearse su papel en el deporte: “Tengo una enfermedad autoinmune y era población vulnerable. Pensé que quizás era momento de alejarme. Pero justo al año siguiente me llamó la selección española… y claro, ¿cómo vas a dejarlo cuando te llaman de la selección?”.
Su paso por la Roja y por el Burela consolidaron su nombre en la élite del fútbol sala. Aun así, le dejaron uno de los aprendizajes más valiosos: saber cuándo parar. “El salto de categoría se nota muchísimo: el ritmo, la exigencia física, la cabeza… entrenaba ocho sesiones a la semana. El cuerpo se resiente y la mente también. Aprendí que hay que tener paciencia y entender que todo es un proceso”.
Hoy, a sus veintinueve años, Elenita sigue disfrutando del fútbol sala en el Castalla, con los pies en la pista y la mirada en el futuro. Cuando se le pregunta si volvería a Primera División, no lo descarta, pero lo dice con calma: “Sigo teniendo llamadas de equipos de Primera, pero ahora valoro mucho mi tiempo. He aprendido a poner en la balanza lo que me hace feliz y dónde quiero invertir mi energía. Si algún día vuelvo, será porque le he vuelto a dar ese peso al fútbol sala en mi vida”.
Giovanni Rodríguez: “Nada de lo que hemos conseguido como equipo ha sido por casualidad”
Héctor Hernández / 28-10-202
Giovanni Rodríguez es uno de los pilares del Club Molina Sport, equipo grancanario que atraviesa uno de los periodos más exitosos de su historia. Con títulos nacionales y europeos, el conjunto se ha consolidado como un referente indiscutible del hockey línea español.
Desde su llegada, Giovanni ha sido testigo y protagonista de esta etapa dorada que, como él mismo reconoce en una entrevista para HA10, “nada de lo que hemos conseguido como equipo ha sido por casualidad, sino fruto del esfuerzo y la dedicación de todos los que forman parte del club”.
Su vínculo con el hockey comenzó desde muy joven. “Recuerdo empezar a jugar al hockey línea con seis o siete años y diría que la elección de este deporte fue una casualidad, ya que estaba apuntado en un curso de verano de patinaje al que mi madre me inscribió y ya una cosa llevó a la otra. Al terminar las clases de patinaje empezaban a entrenar y me llamó la atención”, recordó.
La competitividad que respiraba en los entrenamientos lo impulsó a tomarse el deporte con más seriedad. “Iba a todos los partidos del primer equipo, donde empezaba a ver la velocidad y la intensidad del juego, y eso me hizo esforzarme para llegar a jugar con ellos”, comentó.
Hoy forma parte de un club campeón que ha dominado tanto el panorama nacional como el europeo. El Molina Sport ha conquistado tres European League consecutivas, situándose en lo más alto del hockey línea continental. En España también ha impuesto su hegemonía tras ganar la pasada temporada la Copa del Rey, la Supercopa de España y la Liga Élite, firmando además un récord histórico al lograr veintisiete victorias en otros tantos partidos de liga.
Giovanni ha vivido esa evolución desde dentro: “Es un orgullo formar parte de lo que se ha conseguido y hemos hecho estos últimos años. Llegar a este punto no ha sido fácil, por eso también es una sensación de responsabilidad. Cada título que hemos logrado se disfruta de una manera distinta, aunque todos tienen algo especial. El primero se queda grabado, porque es cuando realmente sientes esa sensación del trabajo que hay detrás. Pero, diría que la Copa de Europa que ganamos en casa es mi recuerdo más especial; ese momento con los compañeros y la afición son recuerdos que te acompañan siempre”, afirmó en conversación con HA10.
De cara a esta temporada, Giovanni mantiene intacta su ambición. “Quiero seguir creciendo, seguir aprendiendo y ayudar al equipo en todo lo que pueda. En el vestuario tenemos claro el objetivo: queremos mantenernos arriba, competir por todos los títulos y disfrutar cada paso. Sabemos que el nivel no es fácil, pero también que tenemos equipo y ganas para seguir haciendo historia”.
En el plano personal, su meta sigue siendo disfrutar del hockey al máximo nivel. “Siempre hay sueños pendientes, pero me quedo con seguir compitiendo al máximo nivel y ganando todo lo posible. Aunque sobre todo quiero seguir disfrutando del hockey y dejar mi granito de arena en el crecimiento del deporte”, añadió.
Como cierre, deja un mensaje claro a las nuevas generaciones que sueñan con llegar a la élite. “Diría que todas las cosas llegan a su tiempo y que no hay que adelantarse a las etapas que tiene este deporte. Hay que disfrutar, trabajar duro y nunca dejar de creer en que el esfuerzo tiene recompensa. En este deporte, la constancia es lo más importante. No siempre es fácil, pero si te esfuerzas y te rodeas de buena gente, las cosas llegan. Y sobre todo, que nunca pierdan las ganas, porque eso es lo que te lleva lejos”.
Anna Salvat, una promesa consolidada del hockey sobre patines
Guillermo Lanchas / 28-10-202
Con apenas dieciocho años, Anna Salvat forma parte del Club Hockey Vila-sana, equipo de la OK Liga femenina, y ya cuenta con un palmarés notable en el mundo del hockey sobre patines. Su historia no solo impresiona por la precocidad, sino por la madurez con la que ha afrontado cada paso de su carrera, como ha contado en una entrevista concedida a HA10.
Pocos imaginarían que, a su edad, Anna esté disputando su quinta temporada en la máxima categoría nacional. Debutó con tan solo catorce años, y aún recuerda con emoción aquel momento, cuando apenas tres meses antes había asistido como espectadora a un partido de la selección absoluta y pedido autógrafos a sus ídolas. “Las había ido a ver a un partido y les había pedido autógrafos, solo tres meses antes de pasar a jugar con ellas”, recuerda. Hoy, con la perspectiva que da el tiempo, admite en declaraciones a HA10 que aquella oportunidad llegó demasiado pronto: “Ahora viéndolo desde donde estoy te diría que no estaba preparada para afrontar todo lo que comportaba entrar en una selección absoluta”.
Con el paso de las temporadas, Anna se ha consolidado como una de las jugadoras más prometedoras del Vila-sana. Entre sus mejores recuerdos figura el Mundialito de Clubes conquistado la pasada temporada, un título que describe como un sueño cumplido: desde pequeña había repetido que quería ser campeona del mundo, y lograrlo en el Aldo Cantoni, “el templo del hockey”, supuso —en sus propias palabras— un plus que hizo la experiencia inolvidable.
Su crecimiento en el club se ha visto acompañado por una trayectoria internacional destacada. Anna puede presumir de ser tricampeona de Europa con la selección absoluta, tras levantar en septiembre su tercer trofeo continental. Sin embargo, subraya a HA10 que los éxitos visibles son solo una mínima parte del esfuerzo real: “Ganar tres europeos es solo la punta de un iceberg, hay mucho sacrificio y muchas horas detrás”.
España, con ocho títulos europeos consecutivos, domina el panorama continental y mantiene un nivel competitivo envidiable. Anna considera que esa superioridad se debe a la solidez de su estructura formativa: “España tiene un nivel superior a los demás países, ya que es el país que tiene mejor base”, afirma, convencida de que esa fortaleza evita que el equipo sufra los habituales altibajos generacionales.
Aun así, no todo han sido logros. Anna confiesa a HA10 que su no convocatoria para el Mundial 2024 fue un golpe difícil de asimilar. “La verdad que no sé por qué no estuve en esa convocatoria”, reconoce, atribuyendo la decisión a la alta competencia en su posición.
Pese a su madurez y su palmarés, Anna mantiene los pies en la tierra y no oculta la realidad del hockey femenino en España. “Ahora mismo creo que ninguna mujer puede vivir del hockey o por lo menos no en España”, lamenta en conversación con HA10. Una frase que resume, con crudeza y lucidez, la situación de un deporte que todavía lucha por alcanzar el reconocimiento y las condiciones que sus protagonistas merecen.
RallyRACC Cataluña 2025: adrenalina y pasión sobre ruedas
Dano Correa / 27-10-202
El RallyRACC Cataluña 2025 ya está en marcha, y cada tramo demuestra por qué esta competición es uno de los eventos más emocionantes del calendario automovilístico. Los motores rugen, los aficionados se concentran en cada curva y la tensión se palpa en el aire: cada kilómetro cuenta y cada maniobra puede marcar la diferencia.
Más allá de la competición, el rally es también una experiencia para quienes aman el mundo sobre ruedas. Las carreteras serpenteantes de Cataluña, los paisajes que acompañan cada tramo y la emoción de vivir la carrera en primera persona crean un ambiente único, donde la pasión por la velocidad se mezcla con la libertad de recorrer cada tramo al ritmo de los motores.
En este contexto, CamperWheels representa ese espíritu de movilidad y aventura que comparten los seguidores del rally. Sus vehículos permiten a los aficionados acercarse a la acción, disfrutar del evento con comodidad y estar siempre listos para vivir la carretera como parte de la experiencia. La filosofía de CamperWheels encaja a la perfección con la pasión que se respira en cada curva del RallyRACC.
El RallyRACC Cataluña 2025 no solo es velocidad y técnica; es también la oportunidad de disfrutar del viaje, de sentir cada instante y de conectar con la carretera y con quienes comparten la misma pasión. Y con soluciones como las que ofrece CamperWheels, la experiencia sobre ruedas alcanza un nuevo nivel.
Diego de Mintenguiaga: “Hemos estado sufriendo todo el partido”
26-10-2025 / Entrevistas con Diego de Mintenguiaga, Jorge Gómez, Santiago López y Andrés Petros tras el Cisneros -- Alcobendas (División de Honor Masculina de Rugby)
Silvio José Pascual, sobre los árbitros: "Yo creo que se han liado solos"
26-10-2025 / Entrevistas con Silvio José Pascual, Joan Traver, Javier Salido y Nicolás García tras el Las Rozas -- Castellón (Liga Élite Masculina de Hockey Línea)
Nacho Gutiérrez: “Se me ha planteado por la cabeza cambiar mi equipo o ir a otros países a jugar”
Carlos Castillo / 24-10-202
Nacho Gutiérrez es el capitán del Tenerife Echeyde, equipo que compite en la División de Honor de waterpolo. Se trata de un club humilde que ha logrado mantenerse en la máxima categoría durante varias temporadas gracias a un proyecto sólido que él lidera con convicción. En exclusiva con HA10, comparte su visión sobre el waterpolo nacional y la situación actual del conjunto tinerfeño.
En un panorama donde los clubes catalanes dominan la escena nacional, mantener la categoría año tras año tiene aún más mérito. “El club es un club pequeño. Vivimos alejados del epicentro que es Barcelona. Y nosotros, nuestro objetivo cada año es mantenerlo en la categoría. Y una vez tenemos la categoría salvada, pues sí que somos ambiciosos y luchamos por cosas más grandes”.
Para una entidad como el Echeyde, clasificarse para un torneo internacional de la talla de la Euro Cup, o incluso proclamarse campeón de la Final 8 de la Northern League, ha sido todo un hito. “Jugar en Euro Cup era algo impensable en el club, cuando yo llegué hace nueve años. Y nos hemos mal acostumbrado un poco, de que hemos estado jugando varias temporadas seguidas y yo creo que eso hay que ponerlo en valor, de que un equipo canario esté jugando allí temporada tras temporada”.
Los inicios del Echeyde en la élite no fueron sencillos. Como ocurre con muchos recién ascendidos, el equipo luchó varias temporadas por evitar el descenso. “Las primeras temporadas en División de Honor fueron complicadas para mí y para el club. No teníamos una buena estructura de trabajo, no había un buen sistema de trabajo. Las cosas no salían, no jugábamos bien”. Sin embargo, la llegada de una figura clave marcó un antes y un después. “Nos costó adaptarnos a la liga hasta que llegó Albert, y ya nos asentamos con claridad”.
La falta de profesionalización en la mayoría de los equipos ha permitido que el CN Barceloneta domine el campeonato durante más de una década, lo que también repercute en la atención mediática y el crecimiento del deporte. “A nivel de inversión hay un salto muy grande entre Barceloneta y los demás equipos, pero no es culpa de la Barceloneta. Al final yo creo que los demás equipos se tienen que poner las pilas, hay que apostar por el waterpolo en cada club y, por qué no, un año romper esa dinámica”.
Esa desigualdad también afecta a los propios jugadores, que a menudo deben buscar alternativas laborales fuera del deporte. “A muchos se nos pasa por la cabeza cuándo terminará porque al final los clubes, los recursos son los que tienen y bueno, invertimos mucho tiempo y al final uno también quiere una estabilidad en su vida. Muchos estudian; en lo personal, yo estudié para ser profesor y pues claro que me planteo un futuro sin el waterpolo”.
Pese a todo, Gutiérrez se siente muy identificado con el proyecto del Echeyde y con la vida en Tenerife, aunque no descarta nuevas experiencias. “Se me ha planteado por la cabeza cambiar mi equipo o ir a otros países a jugar y así probar otras ligas y conocer gente”.
Ana Eliza: “Pensé que todo lo que me estaba pasando era una señal para que no siguiera”
Aitor Serrano / 23-10-202
Ana Eliza Ribeiro es la actual portera titular del Burela. Nacida en Virginha, Brasil, la guardameta de fútbol sala ha atravesado una vida llena de dificultades y contratiempos en su lucha por dedicarse a lo que más ama: el fútbol sala profesional. La brasileña repasa junto a HA10 este duro viaje hasta alcanzar su sueño.
Con trece años comenzó sus andanzas en el deporte, jugando al fútbol en el pabellón municipal de su ciudad, donde descubrió de cerca el mundo del fútbol sala y se enamoró de él. Ana cuenta que inició esta etapa como una forma de salir de casa, donde la situación familiar era muy delicada. En un principio, el deporte fue una vía de escape, pero a medida que avanzaba, comenzaron a aparecer las dudas y la falta de confianza en sí misma.
Sin embargo, y pese a las dificultades, el fútbol sala le presentó a quien se convertiría en su mayor apoyo: Petric, su actual marido, a quien atribuye gran parte de sus logros tanto profesionales como personales. “Petric se quedaba conmigo en el entrenamiento, repetición tras repetición, haciendo mucho trabajo”.
Gracias a su esfuerzo, Ana recibió su primera oferta profesional por parte del Club Américo Brasiliense, aunque las cosas no salieron como esperaba. “Fueron promesas incumplidas a costa de nuestro trabajo”. La portera relata que el club no cumplía con su salario y que, en ocasiones, tenían que alimentarse únicamente con arroz blanco y café.
Aun así, el sueño de llegar a la élite y su incansable esfuerzo seguían intactos. Pese a las duras condiciones, la pareja grababa sus entrenamientos y los publicaba en redes sociales para darse a conocer. Así llegó la que Ana describe como “la oportunidad que tanto esperaba”: una oferta para jugar en la Primera División de Fútbol Sala de España.
Su fichaje por el Joventut d’Elx supuso un cambio radical en su vida, lleno de euforia y también de miedo. Todo era nuevo para ella, aunque pronto conoció a personas que la ayudaron en el proceso. Sin embargo, Ana no tenía regularizados sus papeles en España y, durante un desplazamiento del equipo a Melilla, tuvo problemas tras un control policial. “Como no conocía las leyes ni mis derechos, pensaba que había hecho algo mal”.
Aquella situación la obligó a regresar a Brasil. Tiempo después, mientras veía un partido del Joventut, escuchó al narrador afirmar que estaba en su país recuperándose de una lesión. Aquello la llevó a contactar con el periodista para contar la verdad y desmentir al club: “Me sentí triste y traicionada por el club, le tenía mucho cariño”.
Tras aquel episodio, Ana firmó por el Zaragoza, aunque su situación no mejoró. El equipo amenazaba a la pareja con deportarla y seguía sin cumplir con sus pagos. La situación fue tan crítica que, en un partido de liga contra el Futsi, Ana llegó a marearse por la falta de comida.
Ante esta realidad, decidió contactar con la Asociación de Jugadoras y denunciar al club. La tensión dentro del equipo aumentó y la portera fue apartada del grupo. Incluso llegó a plantearse abandonar su carrera profesional: “Pensé que todo que me estaba pasando era una señal para que no siguiera. La demanda aún se tiene que pagar, esperaré el tiempo que sea necesario para que eso suceda”.
Finalmente, el Burela apostó por ella, y junto a una plantilla y una institución que realmente la apoyaron, Ana pudo volver a disfrutar del fútbol sala. Durante su primera temporada lo ganó todo con el equipo gallego, y aunque este nuevo curso no ha comenzado con la misma racha, la portera trabaja cada día por seguir mejorando en un entorno donde se siente valorada.
El caso de Ana Eliza Ribeiro refleja el de muchos deportistas que han tenido que sobreponerse a la falta de apoyo y a las injusticias del sistema. Pero ella lo tiene claro: la perseverancia y la resistencia ante la adversidad son las que definen quién eres, no los actos ajenos.
Álvaro Cepero: “El pádel no solo es mi profesión, sino mi pasión y mi forma de vida”
Jose Daniel García / 23-10-202
Álvaro Cepero, natural de San Fernando, es uno de los jugadores más reconocidos del circuito profesional de pádel. En exclusiva para HA10, repasa su trayectoria y comparte su visión sobre el deporte que se ha convertido en el eje de su vida.
Antes de dedicarse por completo al pádel, Cepero combinaba su tiempo entre otros deportes como el tenis y el fútbol. Sin embargo, hubo un momento clave que marcó su decisión definitiva. Su éxito como subcampeón de España en categorías inferiores fue lo que le llevó a elegir el pádel como camino. Desde entonces, este deporte no solo se convirtió en su profesión, sino también —en sus propias palabras— “en mi pasión y mi forma de vida”.
El jugador gaditano comenzó a practicar pádel en una época dominada por la legendaria pareja formada por Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguín, referentes que marcaron su infancia. “Me gustaba ver disputar sus partidos”, recuerda. Además, confiesa que se fijaba especialmente en Sanyo Gutiérrez, de quien afirma: “me impresionaba y admiraba su estilo de juego”. Estas grandes figuras fueron una fuente de inspiración para el joven Álvaro, que desde entonces tuvo claro el camino que debía seguir: esfuerzo, dedicación y constancia.
Los valores son una parte esencial en la filosofía deportiva de Cepero. La humildad y la sinceridad le acompañan desde sus primeros pasos y son, según él, la base de su carácter. “Siempre voy de cara”, asegura, destacando su transparencia tanto dentro como fuera de la pista. Esta mentalidad se refleja en su manera de trabajar, donde la constancia y la búsqueda de la mejora continua son su sello personal. “He madurado mucho, pero siempre con los pies en la tierra”, añade, dejando patente su sinceridad y compromiso.
Fuera de las pistas, Cepero dedica su tiempo a lo que más valora: su familia y su perrita. También disfruta viendo otros deportes, como el fútbol y el tenis, disciplinas que le apasionan desde niño y le conectan con sus raíces deportivas. Concede una gran importancia al descanso, al considerarlo fundamental para rendir al máximo nivel y afrontar con energía los desafíos del circuito profesional.
A lo largo de los años, su estilo de juego ha evolucionado hacia un enfoque más maduro, pausado y ambicioso. Actualmente comparte pista con Andrés Fernández Lancha, una joven promesa a la que, según Cepero, “le está ayudando a crecer y avanzar en el circuito”. Para él, un compañero ideal debe ser sincero y directo, capaz de tomar decisiones propias y resolver los partidos de forma autónoma. En esa línea, considera que la figura del entrenador durante los encuentros tiene un papel secundario, ya que, como afirma, la pareja debe ser capaz de afrontar los retos sobre la pista sin depender de las indicaciones desde el banquillo.
Joel Bertrán: “Ceuta tiene un encanto especial y el Caballa te lo transmite desde dentro”
Héctor Hernández / 22-10-202
Joel Bertrán, jugador del CN Caballa Ciudad de Ceuta, es uno de los nombres habituales de la División de Honor masculina de waterpolo. A sus veintisiete años, el barcelonés ha recorrido un largo camino por distintas piscinas de España hasta asentarse en el conjunto ceutí, con el que vive su segunda temporada. En una entrevista para HA10, Bertrán repasa su trayectoria deportiva y su presente en el Caballa.
Su relación con el waterpolo nació de forma natural, influida por su entorno familiar. “Siempre he estado muy vinculado al agua y al deporte, algo que con los años se convirtió en una parte esencial de mi vida. Mi madre fue quien me introdujo en el mundo de las piscinas. Formó parte de los inicios del waterpolo femenino en España”, explicó.
Sus primeros pasos los dio en el CE Mediterrani, dentro de la escola d’aigua, donde practicaba tanto natación como waterpolo. “Cuando el programa se desmontó, tenía once años y nos dieron a elegir entre una u otra disciplina. La elección fue fácil: en casa, mi hermana hacía natación, y la veía entrenar antes del colegio, por las tardes y también los sábados. Yo veía que el waterpolo tenía horarios más llevaderos, así que entre la pastilla azul y la roja, elegí la roja”, comentó.
Tras su etapa en el Mediterrani, pasó por las categorías inferiores del CN Sant Andreu, donde tuvo la oportunidad de subir con el primer equipo. Después de una cesión al CN L’Hospitalet en Primera Catalana y un año completo en el Sant Andreu, buscó más minutos fichando por el CN Molins de Rei, también en División de Honor. Más adelante, defendió los colores del CN Granollers y la UE Horta antes de llegar finalmente al Caballa.
No fue un camino sencillo: las lesiones de rodilla, tobillo y codo pusieron a prueba su fortaleza mental. “Tuve que empezar prácticamente desde cero”, confesó sobre su dura etapa en el Molins de Rei.
Su llegada al conjunto ceutí, asegura, “fue algo totalmente inesperado”. Todo comenzó con una conversación con un antiguo compañero del Granollers, Daniel López, que acababa de fichar por el Caballa. “Me comentó que el equipo necesitaba un boya y, medio en broma, le dije que pasara mi número. No pensé que realmente me llamarían, pero para mi sorpresa así fue”. Desde entonces, Joel solo tiene palabras de agradecimiento: “La adaptación fue muy buena, tanto al equipo como a la ciudad. Ceuta tiene un encanto especial y el Caballa te lo transmite desde dentro: la gente, el ambiente y el día a día hacen que te sientas parte de una familia”.
En el Caballa vivió uno de los momentos más especiales de su carrera la pasada temporada, cuando el equipo logró mantener la categoría en División de Honor. “Al inicio de temporada pocos creían que lo lograríamos, sobre todo teniendo en cuenta que gran parte de la plantilla no había jugado antes en la categoría. Fue un momento muy especial”, recordó.
De cara a esta campaña, el boya catalán tiene claros sus objetivos: “A nivel personal, mi objetivo es seguir creciendo y aportar el máximo para que el Caballa logre evitar las plazas por el descenso. Ese es el primer paso, pero no nos cerramos a nada: el equipo tiene ambición y queremos mirar más arriba, no nos conformamos con eso”.
En cuanto a su futuro, Joel no esconde su sueño: “Me encantaría poder disputar competiciones europeas con el Caballa. Sería un orgullo enorme representar a Ceuta en un escenario así, y al mismo tiempo la confirmación de que todo el trabajo que el club viene haciendo está dando sus frutos”, reconoció en conversación con HA10.
Como mensaje final, deja un consejo para los más jóvenes: “Las oportunidades llegan cuando estás preparado para aprovecharlas. Yo me bajé del tren de División de Honor con veinte años y volví a subir a los veintiséis. En ese tiempo entendí que lo importante no es cuánto tardas, sino mantener la mentalidad de seguir trabajando cada día”.
Andrea Medina, atleta española que domina el pentatlón y heptatlón, inspira con su constancia y triunfo nacional
Laura Piqueras / 21-10-202
En el atletismo, una de las disciplinas más complejas son las pruebas combinadas. Sobre este tema, Andrea Medina, profesional en la máxima categoría del pentatlón y el heptatlón, compartió sus experiencias en una entrevista con HA10.
Según explica Medina, “el pentatlón se realiza en pista cubierta, en la temporada de invierno, y son cinco pruebas: vallas, salto de altura, lanzamiento de peso, salto de longitud y 800 metros. Cada marca da una puntuación, y al final se suman todas. Al aire libre se convierte en heptatlón, con siete pruebas, porque se añaden los 200 metros y la jabalina”.
Su historia con el atletismo comenzó desde muy pequeña, cuando sus padres la inscribieron en la Milla de Tres Cantos, una experiencia que no terminó con victoria. Esa primera decepción la llevó a apostar por el atletismo, y lo que empezó como un reto personal y una forma de revancha se transformó en su verdadera vocación. Primero se centró en la velocidad y, más tarde, se decantó por las pruebas combinadas, disciplina en la que sigue destacando hoy.
A sus Veintiocho años, Medina se ha convertido en un referente del deporte español tras proclamarse campeona de España de pentatlón en dos ocasiones consecutivas, en 2023 y 2024. “Fue como un regalo a todo el trabajo. Cuando gané, sentí un chute de energía, motivación y confianza. Te vuelves un poco adicta a ganar. Y el poder revalidar el título me demostró que estoy haciendo las cosas bien y que sigo el camino correcto”, admite.
Pese a la gran variedad de disciplinas que abarcan estas pruebas, Medina lamenta el escaso reconocimiento que reciben. “Dicen que no somos especialistas en nada, pero en realidad somos los más completos, porque tocamos casi todas las disciplinas del atletismo. Esa falta de visibilidad se refleja sobre todo en las competiciones internacionales, donde tenemos menos plazas”, asegura.
Sin embargo, sus logros no han llegado sin esfuerzo. Su salto a la categoría absoluta se complicó tras sufrir una rotura del tendón de Aquiles. “Pasé a absoluta con el pie izquierdo, literalmente. Fue durísimo, no tanto por los entrenamientos, sino por verme pasar de estar arriba a caer de golpe”, confiesa. Aun así, no se rindió, y este año ha sido reconocida como Mejor Deportista Absoluta en la Gala del Deporte de Tres Cantos, el mismo lugar donde hace once años recibió el título a Promesa del Deporte.
Con la vista puesta en el Europeo de pista cubierta de Valencia 2027, Medina destaca que el atletismo le ha enseñado lecciones fundamentales sobre constancia, esfuerzo y confianza: “El atletismo te pone al límite, te enseña a valorar lo que haces y a seguir, incluso cuando las cosas no salen”.
Agustín milita en el Real Ciencias de Sevilla de rugby. Nuestro protagonista, originario de Argentina, ha viajado a España y ha logrado debutar en la máxima liga nacional gracias al club sevillano. Según confiesa, “todavía me estoy adaptando, pero por suerte puedo decir que es mi trabajo”.
Su paso por la Península Ibérica no es más que el tercer país que pisa gracias a este deporte. El primero, como no podía ser otro, fue su país natal, donde el rugby siempre ha formado parte de su vida. Con apenas nueve años se apuntó a su primer club, tras enamorarse del deporte al acompañar a su hermano fin de semana tras fin de semana.
En su adolescencia, con dieciséis años, veía cada vez más cerca el objetivo de debutar en la primera de Argentina. Finalmente lo consiguió y allí vivió uno de sus mejores recuerdos al alzarse con el título liguero. “Salir campeón con la primera de mi club creo que puede ser uno de mis recuerdos más lindos”, declara para HA10.
Tras su paso por la tierra del mate, viajaría a Italia, donde nos confiesa: “el primer año fue difícil por los motivos de aprender el idioma y adaptarse a una cultura nueva”, aunque asegura que del segundo al quinto año todo fue muy bien: “disfruté de jugar y conocer mucha gente y un país como Italia”.
Antes de dar el salto a la liga española con el Real Ciencias de Sevilla, Agustín compara las competiciones italiana y argentina. Comenta que ambas son muy físicas y con contactos muy duros, aunque logra distinguir una diferencia: “En la liga argentina el rugby es más rápido y se encuentran más espacios que en Italia, que es más lento con las defensas muy bien ordenadas”.
Ya en su actual etapa en la capital andaluza, disfruta del crecimiento del rugby en España. “El crecimiento es un proceso que lleva tiempo, pero creo que van por buen camino, donde los clubes tienen que apostar por sus inferiores y cada año tener más chicos jóvenes con ganas de jugar al rugby”, afirma para HA10. Además, aplaude el trabajo del combinado nacional: “el seleccionador está haciendo un buen papel”.
Por último, Agustín pone el acento en la recuperación entre semana, la buena alimentación y el descanso adecuado para poder rendir al máximo en cada partido.
19-10-2025 / Entrevistas con Nuria López, Judith Hernández, Elena Jiménez y Oihane López de Ullibar tras el Olímpico -- CRAT (División de Honor Femenina de Rugby)
Xavier Pérez: “Aquí siempre cuesta mucho jugar, el Canoe pone las cosas muy difíciles”
18-10-2025 / Entrevistas con Xavier Pérez, Sara Briceño, Paula Nieto e Irene Briceño tras el Real Canoe -- CN Terrassa (División de Honor Femenina de Waterpolo)
Ángel Canales, récords nacionales y el auge del Trail running español
Carlos Castillo / 17-10-2025
José Ángel Fernández “Canales” es un atleta español especializado en Trail running, carreras de montaña y ultras, que ha formado parte de la selección española en tres mundiales de Trail running, los últimos celebrados en Tailandia 2022 y Canfranc Pirineos 2025. En conversación con HA10, Canales compartió sus aspiraciones y su visión del mundo del Trail.
Este octubre se disputó el Mundial de Trail running; sin embargo, Canales sufrió una caída en la bajada de La Moleta que le provocó una fractura en la muñeca, aunque aseguró que esto no ha disminuido su motivación, ya que su objetivo es volver a la selección española en 2027 en Sudáfrica, que sería su cuarto mundial, para resarcirse un poco y, según él, “a ver si por lo menos allí en Sudáfrica lo volvemos a hacer bien como en Tailandia”.
Canales es triple ganador de la ASICS Penyagolosa Trails, donde logró romper un récord que llevaba más de una década vigente con un tiempo de 5h12’54”. Sobre esa hazaña, comentó que fue “uno de esos días que te sale la carrera ideal y la verdad que muy orgulloso. La verdad que Penyagolosa es una de las carreras que más me gustan en el mundo y todos los años que puedo intento ir allí”.
El Mundial de Tailandia 2022 supuso un antes y un después en su carrera, ya que ese cuarto puesto le abrió las puertas a patrocinios y le permitió profesionalizarse. Canales relató que “gracias a mi desempeño en al mundial me patrocinó una marca asiática, que sigue conmigo ahora, y desde entonces soy corredor profesional y eso supuso, pues el salto a algo que nunca había pensado”.
El aumento de corredores en las carreras de montaña en los últimos años ha derivado en mayores éxitos para España a nivel internacional, como refleja el oro en Long Trail del Mundial Canfranc 2025. Canales señaló que “hace cinco o seis siete años, cuando yo empecé en esto del Trail, no había prácticamente corredores profesionales y ahora se está dando cuenta muchos atletas, que si eres bueno, pues al final te puedes hacer corredor profesional, y puedes vivir de esto, así que más personas se lo plantean y este deporte está subiendo como la espuma”.
Aun así, Canales considera que la introducción de jóvenes en este deporte es complicada, ya que los deportes de resistencia como el atletismo, el ciclismo, la natación o el triatlón requieren un gran sacrificio. Según él, “la gente joven, como aquel que dice, no es fácil que se introduzca en este deporte, a no ser que lo hayan visto en familia”.
En cuanto al dopaje, que siempre ha sido un tema polémico en el atletismo, Canales lo relaciona directamente con el dinero: “El dopaje va en correlación al dinero en el atletismo, el dopaje casi siempre se da y si escuchamos los casos de gente que viene de Kenia, de gente de países que no tienen con el que subsistir, y al final claro, para dar el salto a Europa, la gente te promete unas cosas, ven que hay muchísimo dinero que una carrera ganando una carrera tendrías para darle de comer a tu familia y a tus seres queridos y al final ahí está el límite ético”.
José Luis Maluenda: “Dejé el baloncesto porque no era feliz”
Aitor Serrano / 17-10-2025
José Luis Maluenda, bilbilitano (Calatayud) de nacimiento, fue una de las mayores promesas del baloncesto español en la década de los noventa. Durante sus nueve temporadas en la máxima categoría del baloncesto español, logró hacerse un hueco en grandes equipos como el Valencia y llegó a ser el jugador con la cláusula de rescisión más alta de toda la liga. Sin embargo, las lesiones truncaron la trayectoria de un jugador con un futuro muy prometedor. Para HA10, Maluenda nos cuenta de primera mano cómo fue su etapa en la élite y algunas de sus aficiones tras su vida profesional.
Nacido en 1977, el escolta siempre estuvo muy unido al mundo del baloncesto. Desde pequeño, José Luis jugaba en la terraza de su casa, imaginando que formaba parte de un equipo junto a los mejores jugadores del momento, algo común en todo niño con ilusión y ambición. Desde entonces, aspiraba a hacer realidad esas fantasías.
La idea de dedicarse al baloncesto de manera profesional estuvo presente desde temprana edad. Con tan solo catorce años, el Zaragoza le ofreció un contrato tras impresionarle en unas pruebas de nivel. No obstante, un dubitativo José Luis declinó la oferta: “No estaba preparado para esa pregunta”, aunque, una semana después, la aceptó, pues consideraba que tenía mucho más que ganar que perder.
Tras su paso por las inferiores del equipo maño y su debut en la temporada 1995/96 en la Liga ACB, el Zaragoza desapareció por problemas económicos. Esto dejó al escolta sin equipo, hasta que el Valencia se interesó por él y lo fichó. La idea inicial era cederlo al Marbella para que ganara experiencia y confianza, pero el equipo no entró en la liga tras la pretemporada, por lo que se quedó en el Valencia. Sin embargo, su temporada no fue como esperaba: sin minutos y con escasos entrenamientos, José Luis se desanimó: “Ese año me estanqué”.
En las siguientes temporadas, gracias a su trabajo, se consolidó en el equipo y su rendimiento fue espectacular, lo que llamó la atención de los equipos más grandes de la liga. Así, el Real Madrid se interesó por él. Pese a ser “culer” en términos futbolísticos, en Madrid contaba con grandes amigos que le ayudaron a adaptarse: “Era una oportunidad muy grande para crecer”, aunque los acontecimientos tomaron un giro inesperado.
Tras la oferta de los blancos, su representante contactó con el presidente del Valencia, Juan Roig, quien citó a José Luis en su casa para hablar. El jugador recuerda la conversación como breve, pero clara: “Yo estoy cerrado a que te quedes, pero te puedes ir y tú quieres irte, pero piensa que también te puedes quedar”, fueron las palabras del presidente.
Finalmente, Roig hizo una oferta que se tradujo en la renovación de José Luis y en un contrato con la cláusula de rescisión más alta de toda la liga en aquel momento.
Lamentablemente, las cosas no salieron como esperaba. Tras lograr éxitos como la Copa del Rey de 1998 y mantener un gran nivel como jugador, las lesiones de rodilla mermaron su carrera. Con tan solo veintiocho años, el escolta decidió retirarse: “Dejé el deporte de élite por no ser feliz, porque, pese a poder aguantar más, no podía rendir a mi máximo nivel”.
A pesar de ello, José Luis no perdió el contacto con el deporte. Es un gran aficionado al golf y comenta que su objetivo es ser el mejor jugador amateur posible. Además, es precursor de “Locos por el Golf”, un espacio de encuentro y participación para jugadores amateurs, junto a su amigo Juan Luis Giménez (guitarrista de Presuntos Implicados), cuyo nombre se inspira en la película de animación de 2008 Locos por el Surf.
Además, el escolta mantiene una vida muy ligada a la música electrónica, actuando como DJ en eventos y festivales donde comparte sus gustos musicales.
Sin duda, José Luis Maluenda fue uno de los deportistas más prometedores del baloncesto en los años noventa, pero también un ejemplo de que la vida de un deportista de élite —y de cualquier persona— va mucho más allá del trabajo y la vocación profesional.
De Guayaquil al Madison Square Garden, la imparable carrera de Carlos Ramos
Héctor Magano / 16-10-2025
De pelear en el gimnasio del Rayo Vallecano a enfrentarse a Henry Lebron en el Madison Square Garden de Nueva York, Carlos Ramos Espinoza (17-3-1) ha consolidado su nombre en el boxeo español como uno de los talentos más prometedores del peso pluma y súper pluma. Nacido en Guayaquil, Ecuador, pero nacionalizado español, ha logrado destacarse a nivel nacional e internacional, siendo campeón de España y de la Unión Europea, y disputando un campeonato de Europa de la IBF. Su trayectoria ha sido seguida de cerca por medios especializados como HA10, que han destacado su constancia y profesionalismo dentro del cuadrilátero.
Carlos comenzó su relación con el boxeo a la temprana edad de doce años. Solo dos años después, con catorce, ya tenía claro que quería dedicarse a este deporte de manera profesional. “Desde muy pequeño me han gustado los deportes de contacto, una de las figuras que más me ha marcado e inspirado ha sido Floyd Mayweather”, comentaba el púgil sobre sus inicios y modelos a seguir. Esa pasión temprana le permitió combinar sus estudios con un entrenamiento constante, que pronto le dio resultados notables en el ámbito amateur.
En 2018, tras ganar el campeonato nacional en el peso pluma, y en un intervalo de apenas siete meses, se hizo también con el campeonato de la Unión Europea de la EBU del mismo peso, adjudicándose dos títulos consecutivos que le abrirían las puertas a disputar un tercer campeonato por el cinturón europeo de la IBF. “Cuando me coroné campeón de España, sabía que en poco tiempo iba a optar por el título de la unión europea”, aseguraba el español. Este logro consolidó su reputación en Europa y llamó la atención de promotores internacionales, quienes le ofrecieron la oportunidad de competir en escenarios de alto nivel, como Estados Unidos.
Su carrera no ha estado exenta de obstáculos. Sobre su derrota frente a James Dickens, Espinoza señaló: “Fue mi primera derrota por un cinturón, una pelea igualada, perdí por falta de experiencia. Después de esa caída subí al súper pluma y me fui a los Estados Unidos para seguir peleando hasta que se presentase otra gran oportunidad”. Esta experiencia le permitió madurar como boxeador, mejorar su técnica y prepararse para retos mayores, siempre con la mirada puesta en títulos de mayor relevancia.
“El rival más difícil que he enfrentado ha sido sin duda Henry Lebron en Madison Square Garden por su bagaje y mentalidad”, destacaba Espinoza sobre el invicto boricua, rankeado por tres de las cuatro grandes organizaciones del boxeo (WBO, IBF, WBA). Aquella pelea marcó un antes y un después en su carrera, pues enfrentarse a un rival de tal nivel en un escenario de prestigio mundial consolidó su experiencia y visibilidad dentro del boxeo internacional.
El próximo objetivo en la carrera del púgil, tras recuperarse de dos lesiones de hombro consecutivas, es volver a la actividad y luchar por el título nacional del peso súper pluma. “Mi techo como atleta sin duda se encuentra en ser campeón mundial, que es lo que siempre he soñado; todavía tengo por delante mucho margen de mejora”, recalcaba el boxeador respecto a sus límites dentro de las cuatro cuerdas. Para alcanzar esa meta, Espinoza continúa entrenando diariamente, enfocándose tanto en la fuerza y la resistencia como en la estrategia y la técnica, elementos clave para competir al máximo nivel.
Medios como HA10 han seguido de cerca su trayectoria, destacando no solo sus logros deportivos, sino también su compromiso y disciplina, valores que le han permitido superar las dificultades propias de un deporte exigente y competitivo. La historia de Carlos Ramos Espinoza es un ejemplo de perseverancia y pasión, y su carrera promete seguir dejando huella en el boxeo español e internacional en los próximos años.
Nayra Solís, una historia de superación, esfuerzo y pasión ante las adversidades
Jose Daniel García / 16-10-2025
Nayra Solís es una de las jóvenes promesas del balonmano femenino español. No lo ha tenido fácil, pero en exclusiva para HA10 repasa su trayectoria y los pasos que la han llevado hasta el presente. Desde sus inicios, la jugadora del Balonmano Málaga ha demostrado que con pasión, esfuerzo y resiliencia se puede llegar a la élite.
Su historia comenzó en el equipo de su colegio, el Tierno Galván de Puertollano (Ciudad Real), donde empezó a practicar balonmano mientras también hacía gimnasia. Con el tiempo, tuvo que decantarse por uno de los dos deportes, eligiendo finalmente el balonmano, movida por una chispa especial y la ilusión que le generaba cada entrenamiento.
Su gran referente siempre ha sido Marta López, una jugadora en la que Nayra se fijaba e inspiraba para seguir mejorando. De ella admiraba “su personalidad, su estilo de juego, su liderazgo y su garra en la pista”, nos contaba la jugadora de Puertollano. Un dato curioso es que cuando Nayra empezó a jugar no lo hacía en la misma posición que ocupa actualmente, algo que refleja su versatilidad y capacidad de adaptación dentro del terreno de juego.
Para Nayra, vestir la camiseta nacional representa una de las mayores aspiraciones de su carrera. “Representar a la selección absoluta es un auténtico orgullo y honor, de las cosas más bonitas que puede alcanzar una jugadora”, afirmaba. Ya sabe lo que es defender los colores de las Guerreras, pues formó parte del equipo juvenil que se proclamó campeón del mundo en 2024, un logro que la llena de orgullo tanto por sí misma como por toda aquella generación de jugadoras que compartieron ese éxito.
Fuera de las pistas, Nayra valora el tiempo con su familia y amigos, momentos que aprovecha para desconectar y recargar energías. Sin embargo, no pierde de vista la importancia del trabajo diario y la constancia en su preparación. “Lo físico cada vez es más importante, ya que el balonmano es un deporte de mucho contacto, y lo mental cada vez está tomando más importancia”, explicaba. Es una deportista disciplinada que ha madurado rápidamente desde que comenzó a entrenar en doble sesión, tanto por las mañanas como por las tardes.
Actualmente, Nayra ha superado uno de los mayores retos que puede enfrentar cualquier deportista de élite: una grave lesión de rodilla. Sobre este proceso, nos confesaba que ha aprendido a valorar más que nunca el esfuerzo realizado para recuperarse, y que su gran objetivo ahora es “lograr su mejor versión”, algo por lo que trabaja con humildad y sacrificio cada día. Nayra Solís es, sin duda, una deportista que no se rinde ante las adversidades y que siempre mantiene una actitud positiva, incluso en los momentos más difíciles.
Lucas García Pernas comparte su experiencia con los alumnos del Curso Superior de la APDE
Héctor Hernández / 15-10-2025
Lucas García Pernas, redactor y narrador en Radio Nacional de España, visitó a los alumnos del Curso Superior de Periodismo en Eventos Deportivos de la Asociación de Periodistas Deportivos Europeos (APDE) para compartir su trayectoria profesional, sus vivencias en el mundo de la comunicación y una serie de consejos sobre cómo afrontar los retos del periodismo deportivo actual.
Exalumno del mismo curso, García Pernas regresó al aula donde se formó hace una década. En su intervención recordó con emoción aquellos primeros pasos en la profesión y destacó la importancia que tuvo su paso por la APDE para construir una base sólida que le ha permitido desenvolverse con soltura en distintos ámbitos del periodismo. Subrayó que su formación le otorgó una visión global del oficio, algo que considera esencial en un entorno cada vez más competitivo y cambiante.
Durante la charla, explicó que el periodista moderno debe estar preparado para afrontar múltiples tareas y adaptarse a los nuevos formatos que demanda la audiencia. En ese sentido, incidió en la necesidad de adquirir competencias diversas: “Ahora los periodistas no somos mono-tarea. Hay que saber escribir, narrar, grabar y locutar”.
Esa versatilidad, señaló, es lo que marca la diferencia entre un periodista preparado y otro que se queda atrás. En un sector donde la inmediatez y la tecnología son protagonistas, García Pernas animó a los alumnos a mantener siempre una actitud abierta al aprendizaje y a no limitarse a una sola función. “Hay que salir de la zona de confort y mostrarse predispuesto a todo”, comentó, insistiendo también en la importancia de conocer a fondo todo tipo de deportes, incluso aquellos menos mediáticos, ya que esa amplitud de miras puede abrir puertas inesperadas en el futuro.
A lo largo de su trayectoria profesional, que ha desarrollado principalmente en Radio Nacional de España, Lucas ha aprendido que el periodismo deportivo requiere una gran dosis de entrega y vocación. “Es una profesión muy sacrificada. Requiere muchos sacrificios, pero merece la pena si es tu pasión. Es muy gratificante”, aseguró ante los estudiantes. Sus palabras reflejan una realidad que muchos jóvenes periodistas descubren al incorporarse al mercado laboral: la necesidad de trabajar con dedicación y perseverancia para ganarse un lugar en un ámbito altamente exigente.
Antes de finalizar su intervención, García Pernas quiso dejar un último consejo práctico a los alumnos del curso: “Aprovechad cada salida y cada evento, ya que nunca sabéis si vais a estar en otro medio que os acredite para cualquier partido”. Con ello, animó a los futuros periodistas a valorar cada oportunidad, por pequeña que parezca, y a construir desde la experiencia diaria su propio camino profesional.
La visita de Lucas García Pernas dejó una enseñanza clara: el periodismo deportivo no solo demanda talento, sino también constancia, esfuerzo y pasión. Su testimonio sirvió para recordar que, detrás de cada narración o crónica, hay años de preparación, sacrificio y compromiso con la información veraz. Su trayectoria demuestra que, con dedicación y entrega, es posible transformar una vocación en una profesión sólida y duradera dentro del panorama mediático español.
Isabel Barreiro: “Estar en Los Ángeles sería un objetivo realista y a la vez complicado, pero un sueño
Laura Piqueras / 14-10-2025
Isabel Barreiro comparte en una entrevista para HA10 cómo comenzó su relación con el atletismo, un deporte que ha marcado su vida y en el que sigue persiguiendo nuevos logros.
La atleta reconoce que su inicio en esta disciplina fue fruto de una casualidad. Todo comenzó tras una charla en el colegio, donde la animaron a practicar atletismo. A los seis años dio sus primeros pasos en este deporte, iniciando así una larga trayectoria que la ha llevado a competir en la máxima categoría del atletismo español.
Aunque en un principio lo hacía por diversión, Barreiro admite que no fue hasta los veintitrés años cuando se planteó dedicarse al atletismo de manera profesional. “Al principio entrenaba porque me gustaba, pero realmente hasta quizá en el último año de Sub-23 no me había planteado seriamente dedicarme a esto”, explica. Desde entonces, cada entrenamiento y competición han supuesto un paso más hacia adelante en su carrera.
Para la mayoría de los atletas, el salto de la categoría Sub-23 a la absoluta supone un cambio importante al que deben adaptarse. Sin embargo, para la española no fue así. “En categoría Sub-23 ya se nos suelen juntar mucho con las absolutas, entonces ya te vas midiendo un poco con las mayores. No me costó demasiado”, asegura. Su progreso la ha llevado a conseguir grandes resultados, entre ellos la cuarta posición en el Campeonato de Europa Sub-23 en los 5.000 metros y la medalla de oro en el Campeonato de España de 10.000 metros.
El atletismo le ha dejado infinidad de recuerdos, pero destaca especialmente su primera medalla absoluta en cross, un momento que define como “clave” en su carrera. Paralelamente, ha sabido compaginar el deporte con su formación en fisioterapia. “No es fácil, pero siempre me organicé muy bien. Lo que más me gustaba era ir a entrenar, y sabía que, si no organizaba mi tiempo, no iba a poder hacerlo. En la universidad, con las prácticas largas, era complicado, pero lo conseguí”, explica. La organización, la constancia y la disciplina son algunos de los valores que el atletismo le ha inculcado.
Actualmente, Barreiro tiene metas claras: prepararse para la media maratón de Valencia, centrarse en el cross y después en la pista, con los 5.000 y 10.000 metros como objetivos principales. A largo plazo, como muchos atletas, sueña con participar en unos Juegos Olímpicos: “Sí, es algo que también me gustaría conseguir. Estar en Los Ángeles sería un objetivo realista y a la vez complicado, pero un sueño”, concluye.
David González, las adversidades son el último escalón hacia la meta
Guillermo Lanchas / 14-10-2025
David es un ciclista natural de Fontiveros (Ávila) que actualmente milita en el equipo suizo Q36.5, con el que ha participado recientemente en la Vuelta a España 2025. Acumula ya siete años en el campo profesional.
A pesar de encontrarse en un gran momento tras esta última gran vuelta, no siempre fue así. En su etapa amateur estuvo muy cerca de “colgar la bici”. “Pasé dos o tres años muy duros, me rompí la rótula y los ligamentos de la rodilla”, confirmó para HA10. Aquella lesión comenzó a alejarle del sueño que perseguía desde sus comienzos en la competición, cuando apenas tenía siete años.
Sin embargo, como él mismo relata, de un año a otro empezó a destacar, recuperando el nivel que mostraba en las categorías de escuelas. Tal fue su progresión que, en su cuarto año como amateur, ya contaba con siete victorias en las mejores vueltas a nivel nacional y una en la Copa de España.
Ese gran rendimiento le permitió dar el salto al pelotón profesional en 2019, una etapa que recuerda con especial cariño. “Lo recuerdo como algo increíble, siempre lo vi casi imposible”, añade. “Además ese año rendí muy bien y disfruté muchísimo de la bici”, llegando a afirmar que fue el año en el que más disfrutó de este deporte.
En su quinto año debutó en la Vuelta a España, donde vivió una experiencia inolvidable: “fue una experiencia inolvidable. Siempre vas con miedo porque son veintiún días, pero me di cuenta del tipo de corredor que era”. Aquella competición le aportó una gran madurez, tanto a nivel personal como profesional.
Este mismo año cambió de equipo y firmó por su actual club, el Q36.5, un cambio que no fue sencillo. “Fue un cambio vertiginoso por la diferencia de idioma y las dimensiones del equipo, además de tratarse de una escuadra muy joven y en pleno crecimiento”, explicó para HA10. “Me costó adaptarme, pero ahora estoy muy feliz”.
Aunque el traspaso resultó inicialmente abrupto, le permitió disputar una nueva edición de la Vuelta a España 2025, muy diferente a la de su debut. “Ha sido totalmente diferente, veníamos con un objetivo claro: apoyar a Tom Pidcock, y eso conlleva mucha responsabilidad”. El trabajo del equipo se reflejó en el resultado final, logrando que el corredor británico subiera al tercer escalón del podio. “Hemos hecho historia estando en el pódium de la Vuelta a España”, asegura para HA10.
“La victoria es el objetivo de cada entrenamiento”, nos comenta. Esa mentalidad lo convierte en un corredor ambicioso y competitivo. Aunque reconoce que actualmente su rol en el equipo no es el de líder, mantiene intacta su ambición por ganar. Por eso, uno de sus recuerdos más emotivos está ligado a una victoria: “levantar las manos en Torres Vedras, Portugal, fue un momento especial, no estábamos pasando los mejores momentos familiares”.
Por último, lanza un llamamiento a los equipos ciclistas y a las instituciones públicas y privadas de la provincia abulense para que sigan apostando por los niños, permitiendo que, como él, puedan cumplir sus sueños. Remarca que sin el apoyo de esas entidades, todo sería imposible.
Carlos Alonso, madurez envidiable para una promesa del futsal
Carlos Castillo / 13-10-2025
Con apenas dieciocho años, Carlos Alonso Font ya compite en la máxima categoría del fútbol sala, y no en cualquier equipo: lo hace en el Cartagena, vigente campeón de liga. El joven jugador busca hacerse un hueco en una plantilla llena de talento, con una competencia y presión que pocos pueden manejar. En conversación con HA10, comparte sus aspiraciones y su visión del futsal.
Carlos proviene de una familia muy ligada al deporte, especialmente al fútbol sala, ya que tanto su padre como su hermano estuvieron profundamente vinculados a esta disciplina. “Desde pequeñito me relacioné con el mundo del fútbol sala porque a mi padre le ha gustado siempre jugar y fundó el club en Calpe y yo pasaba muchas horas en el pabellón. También, por supuesto, influyó que mi hermano mayor practicara este deporte y se le diese muy bien, esto hizo que me iniciara en el futbol sala y que cada vez me gustara más y que disfrutase mucho practicándolo”.
Su hermano Hugo, de hecho, llegó a jugar en clubes como el Murcia y el Alzira, ambos pertenecientes a la Primera División masculina de fútbol sala.
Esta temporada, Carlos milita en el Cartagena, y aunque se trata de su debut en la categoría, es consciente de que los minutos de juego son limitados y la competencia es máxima. “Pienso en aprovechar cada momento de los entrenamientos para mejorar, crecer y llamar la atención del entrenador. Y si cuento con algún minuto, intentar estar lo mejor preparado posible para ayudar al equipo a conseguir sus objetivos”.
En apenas dos partidos ya consiguió anotar su primer gol en la categoría, frente al Ribera Navarra, demostrando al cuerpo técnico que tiene cualidades para aportar al equipo. “Considero que puedo aportar cosas tanto en el aspecto defensivo, por mi energía, espíritu, intuición y rapidez, como en el aspecto ofensivo, en la creación de juego, desborde y búsqueda del último pase y finalización”.
Defender los colores de España tampoco es algo nuevo para él, ya que ha sido convocado por la selección juvenil española. Si todo sigue su curso, su salto a la absoluta no sorprendería a nadie, aunque el joven prefiere mantener los pies en el suelo. “Bueno, para eso todavía queda, pero nunca digas nunca. Yo voy a seguir trabajando cada entrenamiento y cada partido para mejorar en todos los aspectos posibles y si llega la oportunidad, pues a aprovecharla lo mejor posible”.
El Cartagena busca revalidar el título de liga y, por el momento, el equipo marcha líder en la clasificación, firmando un inicio de temporada brillante. “Viendo cómo están jugando mis compañeros, el hambre que tienen, las ganas de conseguir otro título… Si le sumamos el trabajo del cuerpo técnico, que para mí es lo que marca la diferencia, hay muchas posibilidades de conseguir el título”.
Jonathan Barreiro: “En la primera parte nos faltó jugar con más energía”
12-10-2025 / Entrevistas con Jonathan Barreiro, Andrew Albicy, Olek Balcerowski y Mike Tobey tras el Gran Canaria -- CB Málaga (Liga ACB de Baloncesto)
Silvia Morell: “El arbitraje es un poco subjetivo por aquí”
11-10-2025 / Entrevistas con Silvia Morell, Mencia Peláez, Mireia Guiral e Isabel Riley tras el Real Canoe -- CN Mataró (División de Honor Femenina de Waterpolo)
Rodrigo Suarez, ilusión y esfuerzo camino a los Juegos Paralímpicos
Aitor Serrano / 10-10-2025
Rodrigo Suarez Garrosa es un joven judoca que, desde temprana edad, sufre de retinoblastoma bilateral, una forma de cáncer ocular infantil que reduce considerablemente su capacidad visual. Sin embargo, esto no ha sido un obstáculo en su ascenso como deportista de élite, y ha querido compartir su historia con HA10.
Acompañado por su discapacidad visual desde pequeño y con padres que enfrentaron problemas similares, Rodrigo se adentró en el mundo del judo con apenas siete años como actividad extraescolar. “Siempre me ha gustado competir y el judo era un deporte donde me encontraba muy cómodo”. Con esa motivación, llevó su amor por este deporte a las jornadas deportivas de la Fundación ONCE, donde comenzó a practicar con personas con su misma discapacidad. “A mi parecer, el judo es el deporte más inclusivo que hay en el mundo”.
Aunque el mundo del deporte profesional suele percibirse como una meta lejana, Rodrigo nunca desistió: “Desde pequeño me gustaba ver los juegos olímpicos y en especial los paralímpicos, pensando que algún día seria yo el que estuviera al otro lado de la pantalla”. Así, empezó a competir en campeonatos tanto regulares como adaptados, hasta que en el Campeonato de Finlandia 2022 hizo su debut internacional, aunque todavía no profesional. Ese escalón llegó este pasado mayo, cuando, con apenas 19 años, el judoca se estrenó como profesional en Kazajistán.
Por desgracia, su debut no trajo los resultados esperados. Finalizó en séptimo lugar, aunque lejos de desmotivarse, Rodrigo se propuso esforzarse más para que “la próxima vez que me enfrentase a ellos el resultado fuera diferente”.
El judoca fue fiel a su palabra y, con actuaciones impecables, logró alzarse campeón en los Juegos de la Juventud de Turquía y llevarse la medalla de bronce en el Europeo de Georgia. Nuestro invitado confiesa que todo vino gracias a un arduo trabajo sobre su figura: “Vi cuales eran los puntos en los que había fallado y busqué mejorarlos, trabajando día a día”. Estos logros han dado un gran impulso a Rodrigo, sin embargo, afirma que en Georgia se quedó con hambre de más.
A pesar de estos recientes éxitos, el judoca no ha perdido de vista quién es: “El Rodrigo del futuro mantendrá los mismos valores que ahora, esfuerzo, trabajo e ilusión, además de disfrutar de cada momento”. Con estos valores como bandera, Rodrigo nos deja un consejo: hacer siempre lo que más nos ilusione y luchar por lo que queremos. “La forma de lograr nuestros objetivos es la constancia, perseverancia y disciplina, con especial énfasis en el respeto y la gratitud”.
Con el hambre, esfuerzo e ilusión que le caracterizan, Rodrigo se prepara ahora para el Gran Slam de Brasil el próximo diciembre, un paso más hacia su sueño de ser él a quien veamos por televisión en las próximas Olimpiadas.
Miguel Benítez, esfuerzo, constancia y pasión por el pádel
Jose Daniel García / 09-10-2025
Miguel Benítez, un nombre reconocido en el mundo del pádel, comparte con HA10 su historia de dedicación, esfuerzo y superación. Su vínculo con este deporte comenzó desde muy pequeño, creciendo en un entorno donde el pádel formaba parte de su día a día.
El jugador andaluz empezó a jugar siendo apenas un niño, cuando acompañaba a sus padres a distintos clubes. “Mis padres me dejaban jugar cinco minutillos para entretenerme y así cada vez me fui integrando más y más en el pádel”, recordaba entre risas. Aquel gesto, que en un principio fue una distracción infantil, se convirtió con el tiempo en el punto de partida de una trayectoria marcada por la constancia y el sacrificio hasta hacer del pádel su profesión.
En sus inicios, Miguel no contaba con un referente claro, aunque admiraba a los grandes jugadores de la época. Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguín, entonces número uno del mundo, eran sus principales figuras de inspiración. También disfrutaba viendo a Cristian Gutiérrez y a la mítica pareja formada por Seba Nerone y Gaby Reca, de quienes destacaba su estilo de juego. Con esas referencias, Miguel fue forjando su propio camino y se define como “un jugador peleón, guerrero y estratega”, con una gran afinidad por seguir las tácticas que marcan sus entrenadores.
A lo largo de su carrera, el jugador del Puerto de Santa María ha vivido momentos muy significativos. Entre ellos, destaca el título de campeón de España en categorías inferiores, su acceso a las previas y al cuadro del WorldPadel Tour, así como la victoria que logró ante Juan Lebrón y Ale Galán cuando formaban la pareja número uno del mundo. Tal y como nos explicaba, esta última fue la más “mediática” y marcó un antes y un después en su carrera, reforzando su ambición por seguir aprendiendo y mejorando.
Fuera de las pistas, Miguel también demuestra su versatilidad. Le apasiona pasar tiempo con su familia y disfrutar de distintos deportes, de los que intenta aprender siempre algo nuevo, aunque reconoce que “no tengo el tiempo que me gustaría para poder ponerlos en práctica”. También reflexionó sobre la evolución del pádel en los últimos años y señaló que se siente más cómodo jugando en pistas indoor, donde no se premie únicamente la pegada ni el juego lento, sino un estilo más equilibrado.
Uno de los aspectos más admirables de su trayectoria es cómo ha sabido convivir con la diabetes, convirtiéndola en una forma de vida que gestiona con disciplina y el apoyo de especialistas que lo acompañan a diario. Aun así, admite que le gustaría “poder quitársela en las competiciones”.
Actualmente, tiene un objetivo claro: “Estoy centrado en recuperarme de la lesión que tengo, que me impide jugar hasta final de temporada, y poder completar la próxima entera con un gran nivel y rendimiento”.
Miguel Benítez es mucho más que un jugador de pádel. Representa el esfuerzo, la constancia y la mentalidad ganadora de quienes convierten su pasión en un modo de vida.
Jokin ‘Hunter’ García, del K1 al campeonato de España con fuerza y templanza
Héctor Magano / 08-10-2025
Sobre el boxeo: “Esa adrenalina y el respeto por los compañeros fue lo que me enamoró del deporte”, afirmó Jokin García en entrevista con HA10. Jokin “Hunter” García (12-2-1, 7 nocauts) es un boxeador vizcaíno y campeón de España del peso ligero. Comenzó su trayectoria en el boxeo a los catorce años, cuando tras apuntarse a clases de K1, se dio cuenta de que lo suyo no eran las piernas, sino los puños. Hoy, a sus veinticinco años, se prepara para realizar su primera defensa del título frente al madrileño Antonio Collado. La pelea se disputará el 22 de noviembre en La Casilla, Bilbao. “Habrá otro cinturón en juego, aunque aún no puedo decir cuál”, comentaba el púgil.
En su carrera profesional, Jokin se ha enfrentado a boxeadores de gran prestigio a nivel nacional, como Rafael Acosta o Brian Peláez, quienes han sostenido el campeonato de España del peso ligero. De todos los rivales que ha enfrentado, el más destacado ha sido Peláez, contra quien se ha medido en dos ocasiones consecutivas.
Jokin nos contó los cambios que implementó de la primera a la segunda pelea. Sobre el primer encuentro, comentó: “Yo siempre le he tenido mucho respeto como boxeador, pero yo sentía que era más fuerte que él, consideré que el planteamiento que debía llevar a cabo para ganar era ir hacia delante sin dejarle respirar”. “Siempre me he sentido cómodo fajándome con el boxeador que me pongan, soy robusto y hago daño, pensé que le podía noquear”, señalaba García. Tras recibir un empate por decisión mayoritaria, Jokin y su equipo reformularon el plan de pelea que les permitió derrotar a Peláez en el segundo combate, en marzo de 2025.
El día de la pelea, habiendo dado un peso de 134¼ libras en la báscula, Jokin García adoptó un estilo muy diferente al del primer encuentro, manteniendo la distancia, golpeando y saliendo, anulando así el característico boxeo contragolpeador de Brian Peláez. “Fui a boxear en vez de fajarme, mi entrenador, Javi Vaquero, y el resto de mi equipo se encargaron de interiorizarme un estilo totalmente contrario al que estaba acostumbrado”. “Estuve tocándole, moviéndome, no siendo un blanco fijo y midiendo bien la distancia de golpeo, gracias a esto pude contrarrestarle”.
Durante la entrevista, Jokin también compartió los aspectos que necesita mejorar: “Necesito tener autocontrol sobre el ring, saber cuándo tengo que atacar, defender, irme o quedarme al intercambio”. En definitiva, resaltaba la importancia de la templanza a la hora de tomar decisiones: “Hay veces que se me cruza y me gusta liarme al palo, tengo que aprender cuándo es momento de ir al cruce y cuándo toca moverse y agarrar”.
Respecto al cambio de categoría, explicó: “Para el torneo de Riyadh no pude pelear en ligero, así que tuve que subir al superligero, me sentí más cómodo y no sufrí tanto con el peso”. De cara al futuro, el púgil asegura que subirá a las 140 libras: “Intentaré hacer dos peleas más en las 135 y, a la que haya una buena oportunidad en el superligero, subir”.
Almudena Rodríguez, la referente del balonmano canario que sueña con ganar una liga con el club de su tierra
Héctor Hernández / 08-10-2025
Almudena Rodríguez es una de las grandes referentes del balonmano canario. Lateral derecho del Club Balonmano Remudas y de la Selección Española, con más de cien internacionalidades, la jugadora teldense repasa en una entrevista con HA10 su trayectoria, sus retos y su futuro.
Criada en los terrenos de juego de Telde, su historia con el balonmano comenzó casi por casualidad. “Empecé con 8 años porque había entrenadores que impartían clases de balonmano en los colegios. Al final de una clase, se acercó a mí, me dijo que le había gustado mucho y si quería probar en el Remudas. A partir de ahí empecé a probar y a jugar al balonmano”, recordó.
Desde pequeña, Almudena tenía claro que llegaría lejos. “En categorías superiores recuerdo que mi madre se cabreaba conmigo porque le decía que yo algún día viviría de esto. Me decía que tenía que estudiar porque no iba a ser posible. Empecé a ir con la selección canaria, la española y poco a poco me fui dando cuenta de que quizás podía dedicarme profesionalmente a esto y así fue”, comentó.
Debutó con el primer equipo del Remudas en 2013 y, en pocos años, alcanzó grandes éxitos, conquistando en dos ocasiones la Copa de la Reina y la Challenge Cup. “Para mí era un premio. Era la más pequeña del equipo, pero me gustaba porque podía aprender de las mayores. Ellas se portaron muy bien conmigo. Desde pequeña tuve muchos minutos en la categoría y eso te hace sentir como una más. Teníamos un grupo luchador y muy guay, lo que nos hizo ganar esos títulos. Fue una gran alegría”, explicó.
Tras cuatro campañas en el equipo de Gran Canaria, decidió dar un paso más en su carrera y emprender una nueva aventura fuera de España. Fichó por el Gloria Bistrița rumano, donde jugó dos temporadas. “Cogí la oportunidad porque quería conocer otro balonmano, otro mundo. En el Remudas había conseguido varios títulos, estaba a un buen nivel individualmente y me llegó esa oferta. Tenía veintitrés años, era un reto personal y profesional. Irme lejos de la familia, estar en un club nuevo, un nivel diferente que el de España, me motivaba. Lo vi como un gran reto para seguir superándome y estar en la absoluta, y cumplir el sueño de jugar unas Olimpiadas. Además, crecí personalmente. Era una niña lejos de casa y eso te hace madurar muchísimo más”, confesó.
Posteriormente, continuó su carrera en Alemania, donde defendió durante una temporada la camiseta del Thüringer HC. Más tarde, regresó a Rumanía para incorporarse nuevamente al Gloria Bistrița, donde disputó otras dos temporadas.
Su adaptación al extranjero fue excelente. “Me sentía como en el Remudas, pero ahí. Las compañeras que tenía eran geniales y el entrenador confió mucho en mí. Llegar a un equipo nuevo donde tus compañeras te integran y tu entrenador te pone minutos y confía en ti, pues hizo que la adaptación fuera muy buena”, comentó. Es, sin duda, una etapa que recuerda con especial cariño: “Siempre le digo a mis compañeras que si tienen la oportunidad de vivir esa experiencia, que por lo menos una vez en la vida la vivan. Es totalmente diferente. El nivel físico, los entrenamientos, las compañeras. Hay un cambio muy grande. Eso viene muy bien porque te pones a prueba para saber hasta dónde puedes llegar. Nunca me arrepentiré de esa decisión”.
Su salto a Europa llamó la atención de la Selección Española y pronto se convirtió en un nombre habitual en las convocatorias de Las Guerreras. Con el combinado nacional conquistó la medalla de oro en los Juegos Mediterráneos de 2018 y la de plata en el Mundial de Japón 2019. Además, participó en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde España finalizó en novena posición. “Esa primera medalla de oro fue muy importante porque me convertí en deportista de élite. El subcampeonato fue un subidón y los Juegos Olímpicos fue el sueño que me faltaba por cumplir. Fue la mejor experiencia de mi vida. Ojalá todo el mundo pudiera vivirlo”, recordó con emoción.
Después de varias temporadas en Rumanía y Alemania, Almudena regresó al Remudas en 2022. “Soy una persona que se guía mucho por lo que siente. Sentí que me quería ir, que quería vivir otras aventuras. El club quería que siguiera ahí, pero al final tenía otros planteamientos de volver a casa. Tengo mi hogar aquí y quiero seguir formándome en los estudios cuando deje el balonmano. Sentí que extrañaba mucho mi familia. En ningún momento me arrepentí”, afirmó.
Sin embargo, su vuelta no fue la esperada. En esa misma temporada, en el último partido de liga del equipo teldense, la lateral grancanaria sufrió una grave lesión que la mantuvo más de un año fuera de las pistas. “Cuando volví al Rocasa tuve una lesión de cruzado y me perdí esa temporada. Este último año ha sido de adaptación, jugando partidos para recuperar el nivel”, explicó.
De cara a la próxima campaña, Almudena se muestra ilusionada y optimista. “A nivel individual, esta temporada vuelvo a sentir que soy la Almudena de antes. Queda seguir trabajando, pero voy muy bien encaminada. Quiero seguir en esa línea y demostrar día a día que puedo. A nivel colectivo quiero luchar por todos los títulos, tanto por la liga como estar en la Copa de la Reina y, si estamos bien clasificadas en liga, jugar la Challenge Cup”.
Entre sus objetivos, hay uno que aún sueña con cumplir: “Me gustaría cumplir el sueño de ganar una liga con el Remudas. Cuando yo me fui, ganaron una liga y todo el tiempo que he estado aquí nunca hemos ganado ese título”, confesó a HA10.
Finalmente, deja un mensaje inspirador para las nuevas generaciones que ven en ella un ejemplo a seguir: “Que disfruten de lo que hagan, porque si no disfrutas terminas aburriéndote y no podrás llegar (a la élite). Que sean conscientes de que es un camino largo, pero que con trabajo y esfuerzo se puede llegar hasta donde te lo propongas. Y si no lo consigues, que al menos te sientas satisfecha con que lo hayas dado todo”.
A sus treinta y un años, Almudena Rodríguez sigue siendo una de las grandes figuras del balonmano nacional. Su sueño de levantar una liga con el club de su tierra permanece intacto, con la misma ilusión de aquella niña que, con ocho años, comenzó a lanzar su primer balón en el colegio San Roque.
Lucía Rodríguez, pasión y resiliencia en su camino hacia la élite del atletismo
Laura Piqueras / 07-10-2025
Lucía Rodríguez, tras competir en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y proclamarse campeona de España, cuenta en una entrevista para HA10 cómo ha sido su trayectoria en el atletismo hasta alcanzar la máxima categoría.
La atleta descubrió este deporte de manera casi natural, ya que creció rodeada de referentes en su propia casa. Su padre lo practicaba, y aunque no se dedicaba profesionalmente, le transmitió a Lucía la misma pasión. “Fue una mezcla de cosas las que hicieron que me dedicase a esto. Yo destacaba bastante y tenía un círculo muy bueno a mi alrededor que siempre me aconsejaba. Todo el mundo me decía que tenía muchas oportunidades dentro del deporte”, comenta.
Desde los ocho años comenzó a participar en competiciones locales y, lo que empezó como un mero pasatiempo, se convirtió años después en su rutina diaria. Sus primeros pasos en clubes locales en El Escorial le permitieron entrenar y formarse como deportista, creciendo de manera progresiva. No obstante, su punto de inflexión llegó cuando decidió estudiar bachillerato en un centro de alto rendimiento. Allí, el deporte no era solo una actividad, sino una forma de vida, lo que le hizo comprender que debía apostar por el atletismo para dedicarse plenamente a él en el futuro.
En 2021 alcanzó uno de sus mayores logros: participar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Aunque estos se celebraron fuera de la normalidad debido a la pandemia, para ella supusieron un reto tanto emocional como físico. “Unos Juegos Olímpicos es difícil de explicar porque lo que vives allí es tan brutal y emocionante que no hay palabras. Fue una experiencia muy diferente por la situación del COVID, pero el ambiente en la villa, la competición, la emoción… fue algo increíble”. Rodríguez reconoce que, en ese momento, debía ser realista. Pese a que no aspiraba a una medalla, consiguió superar su marca personal en dos días consecutivos, además de clasificarse para la final. Antes de Tokio, Lucía ya había logrado su primera internacionalidad en un europeo de pista cubierta en Torun, una de las competiciones que recuerda con más cariño.
A lo largo de su carrera, Rodríguez ha tenido que aprender a convivir con largas etapas de lesiones. “Lo más complicado es el nivel mental. Puedes trabajar mucho el físico, pero gestionar las lesiones y los momentos complicados es lo más difícil. Es verdad que nos llegan a todos y antes me frustraba mucho, pero ahora trato de ver todo como parte del proceso”, afirma.
Lucía Rodríguez representa mucho más que una atleta de élite. Es un ejemplo de pasión, dedicación y resiliencia. Su historia demuestra que el atletismo puede ser mucho más que un deporte. Además, recuerda que las metas no se alcanzan de un día para otro: el camino está lleno de desafíos, pero con constancia y motivación todo es posible.
Judith Cobián, veinte años y el futuro del hockey línea francés en la máxima competición española
Guillermo Lanchas / 06-10-2025
Judith Cobián, con tan solo veinte años, ya compite en la máxima liga nacional de hockey línea, y no en cualquier equipo: forma parte del vigente campeón de la OKLiga femenina. Además, representa a su selección nacional, Francia, en las competiciones internacionales más importantes, habiendo disputado el europeo hace apenas un mes.
El futuro se presenta prometedor para ella, aunque con un matiz agridulce: “A día de hoy hay muy pocas jugadoras que se puedan ganar la vida de ello, por lo que habrá un punto de mi vida que tendré que dejar de lado el hockey y centrarme en tener un futuro estable”.
Pero no se puede hablar de futuro sin mirar atrás. Judith, como cualquier niña de siete años curiosa e inquieta, se apuntó a la extraescolar de hockey para pasar el rato. Le gustó, y solo un año después se federó en esta disciplina.
Poco a poco fue escalando en el deporte hasta debutar en la máxima competición de hockey línea española. Sobre esa experiencia declara para HA10: “Impresiona, porque venía de jugar en OK Plata y al final hay mucha diferencia de nivel, pero también lo viví con emoción y con ganas de comerme el mundo”.
Sus insaciables ganas de competir la llevaron a ser convocada por la selección francesa, aunque Judith también podía haber representado a España, ya que tiene doble nacionalidad. Hubo un factor decisivo en su elección: “Siendo realista, en España es mucho más complicado que puedan contar contigo, pero muy contenta de haberlo decidido”.
Gracias a esta decisión, Judith pudo disputar en septiembre el europeo celebrado en Portugal, en el que su equipo finalizó en un frustrante cuarto puesto: “Creo que podríamos haber peleado algo más el tercer puesto europeo, pero al final Italia planteó un mejor partido”, añade. “Al final llevas un peso de todo un país en una camiseta y es mucha responsabilidad y sacrificio, pero con pasión, todo es más fácil”.
Por otro lado, España se alzó con el trofeo, pero como bien confirma Judith, no se arrepiente de su elección: “La decisión fue meditada y en frío, durante bastante tiempo”.
A nivel de clubes, cuenta con un total de cinco títulos: tres nacionales y dos internacionales. A pesar de ello, el que recuerda con más cariño es el intercontinental de 2023, en el que se proclamaron campeonas del mundo: “Siempre es un lujo jugar en el Aldo Cantoni (Argentina), delante de tantísima gente y sobre todo consiguiendo un título”.
Por último, Judith hace hincapié en la falta de apoyo a deportes minoritarios y lanza un llamamiento a los aficionados para que llenen los pabellones y aumente la movilización en redes: “Claro que el hockey puede ir a mejor, pero esto es trabajo de todos”.
Marcos López: “Nos ha costado la segunda parte entrar en el partido”
05-10-2025 / Entrevistas con Marcos López, Martxel Etxeberria, Gustavo Fontecha y Damián Ezequiel Huber tras el Liceo Francés -- Ordizia (División de Honor Masculina de Rugby)
Patri Chamorro: “En la primera parte hemos estado muy espesas"
05-10-2025 / Entrevistas con Patri Chamorro, Uxía Rodríguez, Alicia Benete y Carlos Navarro tras el Móstoles - Ourense (Primera División Femenina de Fútbol Sala)
Iris Gutiérrez, una voz firme en la escalada femenina española
Carlos Castillo / 04-10-2025
Iris Gutiérrez es una de las grandes referentes de la escalada femenina a nivel nacional. Se proclamó campeona de la Liga de Rallys de Escalada 2024 en la categoría femenina y ha conquistado diversos campeonatos de bloque en comunidades como Madrid, Galicia y Castilla-La Mancha. Compaginaba su carrera deportiva con el ámbito laboral, aunque actualmente estudia Enfermería en la Universidad Alfonso X el Sabio (UAX) y comparte con HA10 su historia y reflexiones sobre este deporte.
Desde pequeña ha estado vinculada al deporte: su madre fue jueza de taekwondo y su padre, aficionado al esquí, la animaron a practicar distintas disciplinas. Sin embargo, fue la escalada la que la conquistó. “Lo que me marcó de la escalada fue el entorno (naturaleza) y el compañerismo, pues al final pones tu vida en manos de tus compañeros y pasas el día entero con ellos”.
Como ocurre en muchos otros deportes, la financiación en la escalada es limitada. “O pagan muy poco o, como en mi caso, me pagan a través de esas proyecciones. No se entiende como tal quitando deportes como fútbol, baloncesto, multitudinarios, y el resto, que somos gran parte del deporte, somos más precarios. Entonces, además de que no tenemos ayudas propias del Estado por los patrocinios. Para que te hagas una idea, el equipo de velocidad de escalada de la federación tiene que hacer un crowdfounding”. También critica la falta de apoyo del sector privado: “En general, las marcas en España no pagan, a diferencia de Estados Unidos, Inglaterra, etc.”.
La llegada de jóvenes deportistas es siempre positiva para cualquier disciplina, aunque, según Iris, también puede traer consecuencias negativas. “Pues aceptan cualquier cosa, ¿no? Entonces eso en realidad nos afecta a la comunidad escaladora, pues el que realiza un trabajo y rompe el mercado con un precio más bajo, y a eso le sumas que en España estamos acostumbrados a no pagar económicamente, sino al trueque o cosas así”.
España vivió un momento histórico en la escalada con el oro olímpico de Alberto Ginés en Tokio 2020. Sin embargo, para Iris, aquel logro tuvo un impacto ambiguo. “Ese hecho histórico de ese oro olímpico es un arma de doble filo, porque hubo un boom exponencial y se notó que muchísima más gente empezó a escalar, y se puso como de moda, pero la roca no es infinita, es química, y el mantenimiento de la roca es por parte de la comunidad. O sea, hay días de escalada que están... ha pasado tanta gente por ahí, por ejemplo, que ya no se pueden hacer, porque se lava la roca”.
Actualmente, Iris continúa sus estudios de Enfermería en la UAX, aunque no descarta volver a su tierra en el futuro. “Me encantaría poder volverme a mi tierra, sabes que con la escalada, pues sería completamente inviable poder vivir allí. Es buscar como una segunda salida y, bueno, porque también tengo una edad y estar ahí a pie de cañón siempre es duro”.
Andoni Azurmendi, pasión y compromiso al servicio del bádminton
Aitor Serrano / 02-10-2025
Andoni Azurmendi Ibarrola, natural de San Sebastián, es el actual presidente de la Federación Española de Bádminton (FESBA) y una de las figuras más influyentes de este deporte a nivel internacional. Con HA10 ha compartido su recorrido profesional y las iniciativas que buscan consolidar al bádminton como una disciplina cada vez más seguida en España y en el resto del mundo.
Licenciado en Educación Física por la Universidad Complutense y apasionado del balonmano, descubrió el bádminton durante su etapa de formación. Fue entonces cuando decidió obtener la titulación de entrenador de máximo nivel, aunque reconoce que nunca se consideró un gran técnico. En un país donde muchos deportistas rehúyen de la gestión federativa, Andoni se muestra como alguien dispuesto a entregarse plenamente para mejorar el deporte de su vida.
Antes de asumir cargos directivos, colaboró con la FESBA en programas como Vuela con el bádminton, que llevó este deporte a las escuelas mediante la dotación de material específico, o Se busca campeón, con el que se seleccionaba a jóvenes talentos sub-13 para potenciar su desarrollo. “Antes era ciencia ficción llegar a grandes resultados en ciertos deportes”, recuerda.
Su dedicación lo llevó en dos mil diez a ser nombrado presidente de la Federación Vasca de Bádminton, cargo que ocupó hasta dos mil veinte, cuando fue elegido máximo dirigente de la FESBA. En dos mil veinticuatro fue reelegido, aunque el inicio de este segundo mandato estuvo marcado por un episodio polémico: diecinueve denuncias por supuestas irregularidades en las votaciones, presentadas ante el CSD por la candidatura rival. Todas fueron desestimadas, aunque el propio Andoni lamenta que ocurrieran: “Da pena que esto sea así en una federación donde vota más del sesenta por ciento de las personas que pueden hacerlo”. Aun así, prefiere dejar atrás ese capítulo, convencido de que solo ensucia la imagen de una institución sólida.
En el plano internacional, Azurmendi ha alcanzado un reconocimiento notable tras ser nombrado uno de los veinte miembros del Comité de la Federación Mundial de Bádminton. Su papel es clave, ya que forma parte de la Junta Directiva encargada de asesorar y decidir el rumbo de este deporte a nivel global. Sin embargo, nunca pierde de vista a España y procura trasladar a esa mesa todas las necesidades del bádminton nacional, tomando como referencia modelos avanzados como el francés. Eso sí, admite que no siempre resulta sencillo compaginar tantas responsabilidades: “No puedo hacer que el día tenga treinta horas”, bromea.
En cuanto a su labor al frente de la FESBA, destaca iniciativas como Planeta Senior, una modalidad pensada para que los jugadores mayores de treinta años sigan disfrutando del bádminton mientras lo deseen. “Son los pioneros y los que guían a los más jóvenes a alcanzar esos sueños que tienen”, subraya. También impulsa becas de apoyo a la formación de mujeres deportistas, en coordinación con diferentes instituciones.
Pero quizá lo más llamativo sea el desarrollo del AirBádminton, una variante al aire libre que busca acercar el deporte a más personas y que persigue un objetivo ambicioso: llegar a convertirse en disciplina olímpica, al igual que sucedió con el voleibol y su modalidad de playa.
Apasionado del deporte y del bádminton en particular, Andoni Azurmendi afronta cada día su responsabilidad como presidente de la FESBA con la ilusión de un aficionado más, convencido de que este deporte tiene todavía mucho camino por recorrer.
“Nico” Flaz: “Si no me presentan un título mundial después del combate contra Johnson haré la pelea contra Polanco”
Héctor Magano / 02-10-2025
Durante una entrevista con HA10, el prospecto Nicklaus “Nico” Flaz afirmó que, si no consigue un título mundial tras su próximo combate contra Delante Johnson, enfrentará a Rohan Polanco. El puertorriqueño de veintinueve años atraviesa una etapa clave de su carrera y empieza a consolidar su nombre entre la élite de las 147 libras.
Flaz (15-2, 10 KOs) es un boxeador de peso wélter que actualmente ocupa el puesto número once en los rankings de la IBF y la WBO. Como muchos prospectos, ha tenido que afrontar una de las pruebas más duras en el boxeo: la derrota. Perder en un deporte donde la condición de invicto suele abrir puertas puede ser un golpe devastador para la proyección de un púgil. Sin embargo, en su caso, esa caída le sirvió como motor de evolución:
“Me ha ayudado a crecer, a corregir muchos errores que cometía al principio de mi carrera y a hacerme más fuerte mentalmente”.
Tras aquella experiencia, tomó la decisión de cambiar de entrenador y pulir su estilo: “Sentía que no me estaba enseñando nada”. Dejó de ser un boxeador únicamente fajador para incorporar desplazamientos, defensa y ángulos a su repertorio.
“Sin esas derrotas no habría madurado tanto, me han preparado para los escenarios más grandes que están por llegar”, afirmaba convencido.
El reto más importante de su trayectoria se producirá el próximo 7 de noviembre en la Jenkins Arena en Lakeland, Florida, donde se enfrentará a Delante “Tiger” Johnson (16-0, 7 KOs), olímpico estadounidense y prospecto invicto de veintisiete años.
La pelea, anunciada recientemente, podría convertirse en la llave definitiva hacia la disputa de un campeonato mundial. Flaz y su equipo llevaban meses en busca de un rival de alto nivel. Aunque en un principio se barajó la posibilidad de enfrentarse a Peter Dobson, finalmente fue Johnson quien aceptó el combate.
“La pelea con Johnson pienso que es mucho mejor que con Dobson, es una pelea más fuerte, más grande y con más exposición”, explicaba Flaz.
Respecto al ascenso de Johnson a la división wélter, añadió: “Su reciente subida a la categoría no creo que sea un factor a favor, es un boxeador alto y ya lleva dos peleas en las 147 libras, pienso que se puede haber acoplado al peso rápido”.
Sobre el estilo ofensivo de su rival, opinó: “No veo que sea tan determinante, tiene muchos lazos en los que no ataca y prefiere estar detrás de su defensa, moviéndose, pero si viene a pelear será una noche más entretenida”, comentaba entre risas.
Mirando al futuro, Flaz es claro con sus objetivos: “Quiero un campeonato mundial, sé que he estado muy cerca y después de esta pelea estaremos más cerca”.
En cuanto a los cruces verbales con el dominicano Rohan Polanco, quien lo había calificado como un rival fácil, fue contundente: “Si no me dan un título mundial quiero a Polanco, para él todos somos fáciles, pero cara a cara es diferente. No vale de nada hablar fuera del ring si luego no lo respaldas”.
Irene Gómez comparte su experiencia como periodista deportiva con los alumnos del Curso Superior de Periodismo en Eventos Deportivos
Jose Daniel García / 01-10-2025
Los alumnos del Curso Superior de Periodismo en Eventos Deportivos de la APDE (Asociación de Periodistas Deportivos Europeos) tuvieron la oportunidad de recibir una clase magistral de Irene Gómez Martínez, periodista deportiva especializada en narraciones de tenis y pádel. La periodista, ex alumna del curso, compartió con los estudiantes su trayectoria y las claves de su experiencia profesional en distintos medios deportivos.
Durante la charla, Irene explicó cómo su pasión por el deporte, presente desde la infancia, la llevó a perseguir su sueño de dedicarse al periodismo deportivo. “Esto me ha llevado a conseguir lo que más soñaba”, comentó, destacando la importancia de la perseverancia y la formación continua.
Aunque en un principio su interés estaba centrado en el fútbol y soñaba con narrar partidos a pie de campo, la oportunidad de cubrir un evento de pádel cambió su perspectiva y la impulsó a explorar otras áreas del periodismo deportivo. Tras finalizar su carrera, comenzó trabajando en un periódico gallego, donde pudo tocar todos los ámbitos del periodismo: radio, televisión y prensa. “Toqué todos los ámbitos del periodismo como son la radio, televisión y prensa”, explicó, añadiendo que su paso por un Máster en Periodismo Deportivo le permitió integrarse también en el mundo de la producción como ayudante de realización.
La periodista abordó también el tema de las críticas, mostrando una visión positiva y constructiva: “Recibo críticas, pero he aprendido a sobrellevarlas, estamos en un entorno donde las redes sociales amplifican las opiniones”. Además, habló de su experiencia en el circuito profesional de pádel, destacando la colaboración entre periodistas y la importancia de proteger la imagen de los deportistas: “Tienen que llevarse todos como si fuera una hermandad, buscando proteger al deportista en todo momento y conociendo minuciosamente qué contar y qué no para no dar una mala imagen”.
Irene también compartió con los alumnos cómo ha logrado consolidar su carrera cubriendo distintos deportes, invirtiendo tiempo en podcasts y redes sociales para dar visibilidad a su trabajo y fortalecer su marca personal. Entre sus planes de futuro, la periodista destacó su interés en crear un medio deportivo propio centrado en el tenis: “Me gustaría crear mi propio medio deportivo, centrada exclusivamente en el tenis, un entorno en el cuál me siento plenamente identificada”.
La charla de Irene Gómez resultó una valiosa oportunidad para que los alumnos del curso aprendieran de primera mano cómo construir una carrera en el periodismo deportivo, destacando la importancia de la pasión, la adaptabilidad y la constante formación profesional.
Adrián Alonso, velocidad, disciplina y sueños de oro en el patinaje
Laura Piqueras / 01-10-2025
Adrián Alonso, natural de Valladolid, cuenta en una entrevista para HA10 cómo se ha convertido en una de las promesas del patinaje de velocidad español tras sus logros en la categoría junior. Su ascenso en este deporte ha sido meteórico: de comenzar como una simple actividad extraescolar, ha estado acompañado durante toda su carrera por su entrenador hasta competir en los mejores campeonatos de España y Europa.
Con solo veinte años, ya puede presumir de haber sido campeón de España, subcampeón de Europa y bronce en el mundial en categoría junior. Un palmarés amplio que refleja su talento y esfuerzo, y que le permitió ascender a la máxima categoría, la senior, la temporada pasada.
Adrián empezó a patinar en el colegio con apenas tres años por puro entretenimiento. Allí conoció a su entrenador actual, quien le ha acompañado a lo largo de toda su carrera deportiva. Desde entonces, su vida ha girado en torno al patinaje de velocidad. Ha pasado por todas las categorías y competiciones, creciendo a medida que su nivel aumentaba. Siempre ha pertenecido al club donde comenzó su trayectoria, incluso antes de que se constituyese formalmente.
El primer gran logro de su carrera fue un bronce en el Campeonato de España juvenil. Poco después llegaron los títulos que lo consolidaron como uno de los grandes referentes de la cantera española. Su evolución estuvo marcada por un antes y un después con la pandemia. “Fue todo un poco de golpe. Antes de la pandemia solía quedar último, pero después del parón empecé a notar un gran avance en mí mismo. En los primeros campeonatos tras volver conseguí mejores resultados y al año siguiente logré mi primera medalla de bronce”, recuerda. Desde entonces, su progresión ha sido constante, hasta llegar a la categoría senior, donde ahora afronta su segunda temporada.
Este salto de categoría, según cuenta, no ha sido fácil, ya que ha supuesto un cambio radical a nivel competitivo: “En junior solíamos ser cinco o seis los que aspirábamos a conseguir medalla. Ahora, en sénior, cualquiera de los veinte puede ganar y es algo mucho más complicado. Es un nivel mucho más exigente”. Esta exigencia se traslada también al plano internacional, donde la presión aumenta. En el patinaje de velocidad, son dos los patinadores que participan en fondo: uno busca la medalla y el otro ayuda a su compañero acortando sprint o cerrando el aire. “Sí que noté más presión el año pasado porque sabía que podía sacar medalla. No quería decepcionar al compañero que me ayudaba durante la carrera. Al final, aunque la medalla sea mía, no hago yo solo todo el trabajo”, confiesa.
El vallisoletano tiene claros sus objetivos para esta temporada: destacar en los campeonatos de España y ganarse una plaza en el selectivo de la selección nacional, con la vista puesta en el europeo. “También me planteo ir a un Mundial, aunque prefiero ir paso a paso. Mi sueño sí que es conseguir un oro tanto en un europeo como en un Mundial en la máxima categoría, pero siendo realista, es algo que todavía veo lejos, así que hay que seguir trabajando”, asegura.
Este deporte no se limita a entrenar en el patinódromo. Alonso subraya la importancia de la disciplina diaria, no solo durante el entrenamiento o las competiciones, sino también en la alimentación y los hábitos saludables que forman parte de su rutina. “El sacrificio no está solo en el entrenamiento o en la competición, sino en la vida diaria. Es algo en lo que llevo trabajando desde pequeño”. Sin embargo, insiste en que lo disfruta: “No lo veo como una obligación. De verdad me apetece entrenar todos los días y seguir mejorando”.
Consciente de que el patinaje de velocidad no cuenta con gran popularidad en España, anima a los jóvenes a descubrirlo: “Es un deporte fácil para empezar, divertido y barato. Solo necesitas unos patines”. Consciente del esfuerzo que supone, Adrián Alonso pisa fuerte con los patines para seguir mejorando y dejar huella con su trayectoria.